Cuando empezamos en fotografía, todo son datos, normas, reglas y bases teóricas. Sin embargo, todo esto por sí solo no te ayudará a triunfar en este arte.
En este artículo vamos a intentar descifrar algunos de los secretos que más te ayudarán en esa labor. Siempre teniendo en cuenta que el concepto "triunfar" no se usa aquí como sinónimo de "ser famoso" o de "hacerse rico con la fotografía" sino con el significado de "conseguir lo que se busca", "estar satisfecho con el trabajo de uno mismo".
Disfrutarla y convertir la fotografía en un modo de vida satisfactorio, en general.
Aprende y Aprehende
Es muy importante que puedas hacer ambas cosas en relación a la fotografía para poder llegar a triunfar en ella. Aprender significa conocer, estudiar, observar, analizar. Ampliar tus conocimientos sobre un tema. Aprehender, sin embargo, significa otra cosa: significa hacer tuyos esos conocimientos, absorberlos, integrarlos en tu manera de trabajar. Si verdaderamente quieres triunfar en fotografía, deberás prestar tanta atención en un proceso como en el otro. Ya se ha dicho antes que "hasta que no conozcas a la perfección tu equipo, no podrás ser creativo con él" esto es porque, si no dominas lo que tienes entre las manos, si no has aprehendido todo lo que puedes hacer con ello, deberás estar permanentemente pendiente de buscar opciones, características y maneras de realizar aquello o lo otro.
En el momento en el que la cámara (y todo el proceso fotográfico en general) forme parte de ti y de tu manera de tomar fotografías, podrás liberarte de esta parte más técnica, y por lo tanto, podrás empezar a darle rienda suelta a la creatividad. Esto no significa que si no tienes aprehendidos y/o aprendidos todos los conocimientos necesarios, no puedas ser creativo en fotografía, sin embargo, la creatividad y la capacidad de triunfar en lo que hagas en fotografía se verán muy potenciadas una vez hayas interiorizado todos los conceptos y funcionamientos básicos de este mundillo.
Pero no pienses que la única manera de aprender y de aprehender es estudiar, leer libros o asistir a cursos (presenciales, online o de cualquier otro tipo). En mi opinión, la mejor manera de hacer ambas cosas es relacionarte con gente que ya lo haya hecho antes. Fotógrafos, artistas, personas que sepan en general (incluso no es necesario que sepan más que tú, estando al mismo "nivel de conocimientos" ¡podéis aportaros mil cosas nuevas mutuamente!). Ellos te ayudarán a ver las cosas de una manera distinta, a entender todas las posibilidades que te ofrece el mundo de la fotografía.
No te Condiciones
Es decir, sé tú. Es un poco complicado, lo sé. Sobre todo porque si asistes a cursos de fotografía o, simplemente, intentas aprender leyendo libros o navegando por Internet, tendrás mil influencias permanentemente diciéndote "qué se puede hacer" y "qué es una aberración fotográfica".
Quizás al principio te sirva para conocer las bases más técnicas y teóricas de la fotografía, para entender cómo funciona la cámara, el proceso de exponer correctamente, las principales reglas de composición que te ayudarán a conseguir una fotografía más atractiva visualmente. Pero a medida que vayas aprendiendo y haciendo tuyo este arte, entenderás que lo que realmente tienes que hacer es pasar de todas estas influencias y ser tú mismo con tu cámara. Ver las cosas a tu manera. Si tienes claro lo que quieres conseguir con tus fotos, sabrás qué es lo que tienes que hacer.
En ese momento, deberías trabajar como más cómodo te sientas y sobre todo, no dejarte decir "esto está bien" o "esto está mal". Tú eres el artista, tus fotos son tu arte y si has roto esta o aquella regla o norma fotográfica, es porque has decidido que era la mejor manera de transmitir lo que querías transmitir. Sin embargo, aunque las reglas están para romperlas, para poder pasar de ellas primero debes conocerlas porque no es lo mismo romper una regla por desconocimiento que por voluntad de hacerlo. Así que mi consejo es, de nuevo, que no empieces la casa por el tejado y te tomes tu tiempo para hacerte con una base teórica y técnica de fotografía que es lo que, en un futuro, te permitirá ser más creativo.
Experimenta
En TODOS los sentidos que se te puedan ocurrir. Rompe reglas para ver qué pasa. Haz pruebas, especialmente si no tienes ni idea de qué pasará. Es la única manera de saber qué es lo que más te gusta, qué es lo que más te llena y qué es lo que más disfrutas haciendo. Hay mil aspectos en los que puedas experimentar fotográficamente:
- En composición. ¿Debes dejar aire para la mirada del sujeto? ¿Qué pasa si no lo dejas? ¿Qué pasa si no lo quieres dejar? ¿La regla de los tercios? ¿Y si la regla de los tercios te impide expresar lo que quieres con tu foto? No tengas miedo en probar cosas, aunque la gente te diga que "son raras".
- En equipo. Esto ya ha aparecido en algún que otro artículo pero creo que es una muy buena manera de darle un aire fresco a nuestra fotografía. Cambia tu cámara, tu objetivo, tu manera de disparar. Prueba la fotografía química, intercambia la cámara con alguien que use una marca distinta de la tuya o adéntrate en el mundo de la focal fija si todavía no lo has hecho. ¡Será por opciones!
- En disciplina fotográfica. A veces nos centramos en aquello que se nos da bien y de ahí no salimos. Haz otro tipo de fotos. ¿Te gusta la arquitectura? Prueba a hacer retratos. ¿Sueles hacer macros? Sal a hacer fotografía urbana. Esto te dará una nueva perspectiva sobre el mundo fotográfico que, quizás, te ayude a avanzar en él.
Pierde la Vergüenza
¿Te has perdido alguna foto importante por no atreverte a hacerla? En este artículo te explicamos cómo perder la vergüenza. Pero hoy no vamos a hablar de sólo perder la vergüenza de disparar, porque hay otra vergüenza que también nos puede impedir triunfar en nuestra fotografía, se trata de la vergüenza a enseñar lo que hacemos. De mostrar nuestro trabajo.
La principal razón de ser de esta vergüenza es el miedo al qué dirán, a las críticas. Un secreto: siempre habrá gente que sepa más que tú y eso no debe importarte. Las fotografías que haces son tu arte, puede ser más o menos limitado en función de tus conocimientos o de tu práctica pero, con el tiempo, éstos irán aumentando y por lo tanto, tus fotografías irán mejorando. Además, ten en cuenta que cuando enseñes tus imágenes siempre habrá alguien a quien no le gustarán. Y, de nuevo, eso no debe importarte. Es a ti a quien tienen que gustarle pues son tuyas, eres tú el que se debe sentir cómodo con ellas. Si no es el caso, pregúntate por qué e intenta conseguirlo.
Si, además, tus fotos le gustan a alguien más, ¡eso que te llevas!
Planifica tus Fotos (o No)
Planificar no significa, sólo, planear localizaciones, controlar la luz que habrá en el momento de la toma, conocer el equipo con el que trabajarás (que también). Planificar las fotos significa no disparar a lo loco. Mira primero, dispara después. No cometas el error de mirar siempre a través de la cámara pues hacerlo te condicionará a la hora de ver el mundo. Debes mirar con los ojos y más tarde, intentar conseguir plasmar aquello que has visto con la cámara.
Pero después... date también el lujo de improvisar, de pasar de las planificaciones. De sentirte libre con tu cámara.
¿Y Tú?
¿Añadirías algún consejo más para llegar a disfrutar la fotografía al máximo?