Seguro que más de una vez te has quedado contemplando una nube y has reconocido en ella alguna forma o incluso la cara de una persona. A esto se le conoce con el nombre de pareidolia, y es un fenómeno fisiológico en el que la mente percibe una imagen o sonido donde realmente no existe. Si quieres saber más sobre este fenómeno y cómo aprovecharlo en fotografía, no te puedes perder el artículo de hoy. ¿Te quedas conmigo?
¿Qué Es la Pareidolia?
No todo es lo que parece... Estoy segura de que alguna vez has escuchado el término de pareidolia, pero ¿sabes lo que es realmente?
Este concepto se refiere a las alteraciones perceptivas que se producen en nuestra mente cuando observamos cualquier objeto o situación que no termina de estar estructurada, es decir, que resulta ambigua. Ante dicho objeto o situación, nuestro cerebro la percibe de forma distinta, y la acaba asociando a patrones que es capaz de reconocer.
Por ejemplo, si ves en una roca o en el tronco de un árbol una cara con sus ojos, su boca y su nariz, a eso lo consideramos pareidolia.
¿Por Qué Aperece la Pareidolia?
Según algunas teorías la pareidolia puede deberse a nuestra herencia evolutiva, y nuestra necesidad de detectar rostros por el mero hecho de sentirnos seguros, aunque también se ha sugerido que puede ser una consecuencia del sistema de procesamiento de la información en nuestro cerebro.
Nuestro cerebro recibe continuamente información en forma de líneas, formas, superficies o colores entre otras cosas, y lo que hace es tratar de emparejarlo con recuerdos que tiene almacenados en nuestro conocimiento a largo plazo. Esto explica que una información visual que puede resultar muy ambigua, la interprete como algo que podemos reconocer más fácilmente.
Pareidolia y Fotografía
El fenómeno de la pareidolia también lo podemos utilizar a nuestro favor en el campo de la fotografía para tratar de explotar la creatividad de nuestras imágenes. Piénsalo, como fotógrafos siempre intentamos observar lo que nos rodea y buscar detalles que a ojos de los demás pasan desapercibidos y que sin embargo, si les prestamos atención, tienen un encanto especial.
Entonces... ¿buscar ejemplos de pareidolia no podría ser un buen tema para alguna de nuestras sesiones fotográficas? ¡Pues claro que sí!
Localizar ejemplos de pareidolia, ya sea en tono humorístico o trágico, no es algo excesivamente complicado, pero sí que debemos aprovechar nuestra capacidad de observación al máximo para intentar encontrarlos.
Consejos para Capturar Ejemplos de Pareidolia
No existe un manual que nos indique cómo ligrar buenos ejemplos de pareidolia en fotografía, pero sí que podemos darte una serie de indicaciones para que estés alerta y preparado para cazar tus propios ejemplos. ¡Vamos a verlos!
- Lleva siempre tu cámara encima, o un móvil con buena cámara. Nunca sabes cuándo puede aparecer ante ti un buen ejemplo de pareidolia, así que es interesante que siempre lleves tu cámara contigo, o al menos un móvil con cámara para poder cazarlo en el momento.
- Busca el mejor ángulo para cazar tu ejemplo, no te conformes con el primero. Como ocurre en cualquier temática fotográfica, no todos los ángulos funcionan siempre igual de bien, y con la pareidolia ocurre lo mismo. Cuando tengas localizado tu ejemplo de pareidolia muévete en busca del mejor ángulo para que la identificación de la cara o forma que veas en el ejemplo quede lo más clara posible.
- Busca tus propios ejemplos. Inspirarse en el trabajo de otros es un buen punto de partida para buscar ejemplos de pareidolia, pero cuando vayas a cazar tus propios ejemplos trata de ser original y no repetir las mismas fotos que ya has visto que han hecho otros autores.
- Inspecciona tu entorno más cercano. No hace falta que te vayas a la otra punta de la ciudad a buscar ejemplos de pareidolia. Saca a relucir tu capacidad de observación y trata de localizarnos en tu entorno más cercano (tu casa, la calle de al lado, el parque de la esquina...).
- Ten paciencia. En fotografía la paciencia es una cualidad clave. Como en pasa en otras temáticas, habrá veces en las que estemos más inspirados y la situación sea más favorecedora, y otras en las que no tendremos tanta suerte. En este caso, puede que un día encontremos tres buenos ejemplos de pareidolia, y otro no encontremos ninguno... pero no te ofusques. La clave está en ser pacientes y seguir buscando ejemplos.
- Comparte tus imágenes. No solo puedes sentir cierta satisfacción cuando obtienes un buen ejemplo de pareidolia, sino que cuando compartes esa imagen con otras personas y éstas tratan de averiguar qué es lo que aparece en tu fotografía, puede convertirse en un juego de lo más divertido, creando un vínculo cercano entre el fotógrafo y los espectadores de la imagen.
Algunos Lugares en los que Puedes Encontrarla
Como te decía, la pareidolia la podemos encontrar en cualquier lugar, pero por si no sabes por dónde empezar, aquí te dejamos una lista de sitios en los que puedes empezar a buscarla, como por ejemplo en:
- Los platos de comida.
- Las nubes.
- La parte frontal o trasera de algunos coches.
- La fachada de algunos edificios o casas.
- Algunos objetos domésticos.
- La luna.
- Árboles y plantas.
- Rocas.
- Pavimentos.
- El fuego.
- El humo.
- Una radiografía.
- La espuma de un café.
Yo Veo Caras... ¿Y Tu?
Como has podido comprobar estamos rodeados de ejemplos de pareidolia. Tan solo tienes que explotar tu capacidad de observación, estar atento y fijarte en los pequeños detalles para poder descubrirlos.
Por supuesto, no tienen por qué ser solo caras, aunque es cierto que es el ejemplo más común. Existen ejemplos en los que podemos llegar a reconocer animales o incluso figuras sencillas como un corazón o una estrella. En el perfil de twitter de Faces in Things, podrás encontrar una gran recopilación de estupendos ejemplos de este curioso fenómeno.
Y por último, como siempre, te invitamos a que si tu también tienes tus propios ejemplos de pareidolia los compartas con nosotros en los comentarios. ¡Anímate!