Me ha parecido interesante utilizar esta caja de herramientas como una metáfora para indicar la necesidad de “arreglar” nuestra forma de pensar.
La mente nos juega malas pasadas. A veces debido al ansia; otras debido al estrés; muchas debidas a infravalorar los esfuerzos; y, no pocas, debidas a la ignorancia. Quizá esta última habría que tratarla a parte.
El ansia por conseguir lo que queremos y alcanzar los objetivos que nos planteamos, siempre está presente en mayor o menor medida. La paciencia es una virtud, sin duda, y quienes la poseen creo que son más felices.
Me disperso. Al grano. Caso de estudio.
Persona: El/la que dispone de un teléfono móvil de última generación que hace unas fotos maravillosas o de una compacta o de una Bridge.
El caso: Siempre dispara en automático con resultados razonables en un porcentaje elevado de ocasiones. Procesa las fotos con filtros de Instagram o aquellos más avezados en el procesado, con Lightroom para móvil, Snapseed…
La situación: Se ha comprado / le han regalado una réflex y ha descubierto que hay vida más allá del modo automático, algo que obviamente escapa a su comprensión y a su instinto natural a la hora de hacer fotos. Su mente comienza a pensar en realizar, en vez de hacer.
El ansia: aprender todo lo antes posible.
El problema: ¿De verdad hay que explicarlo? El problema es “todo” y “lo antes posible”.
Reeducando al paciente
Lo primero que tiene que aprender es que “todo” es un infinito difícilmente abarcable y que, en consecuencia, es preferible descomponerlo en partes más digeribles.
Lo segundo, que “lo antes posible” es posible, siempre que iniciemos la construcción de la casa por los cimientos.
Un curso de fotografía instantáneo, en pocos pasos
Si no puedes esperar más, o no tienes tiempo para aprender. Esto es lo mínimo que debes dominar. A partir de aquí, sabrás exponer bien, más de lo que muchos son capaces.
0.- Previo
Si quieres aprender trabaja en manual; condición sine qua non.
1.- Luz Incidente
Es la luz que llega a una escena. La que procede de una fuente de luz como el sol, una bombilla, un foco o la que refleja la luna –sí, es la que nos llega. Es la iluminancia. Se mide con un fotómetro. Es la luz del amanecer, del atardecer, la tamizada por la niebla, o las nubes; también la del mediodía de un día despejado. Y la de la noche, la que refleja la luna que para nosotros es fuente de luz. Y la de las calles. La ausencia de luz también es luz incidente, aunque incida poco o nada.
2.- Luz Reflejada
Es la luz que reflejan los objetos. La que vemos. El color es la longitud de onda que reflejan los objetos, aquella parte del espectro que deciden compartir con nosotros para hacerse visibles. La cantidad de luz reflejada por los objetos depende de cada objeto, es particular de cada uno de ellos. Uno negro refleja menos luz que uno gris y mucha menos que uno blanco.
3.- Lo que la Cámara Ve
Luz reflejada. Solo luz reflejada. La que cada objeto refleja. Nada más.
4.- Cómo la ve
La ve gris. Todo gris. De un gris medio. Ve la luz que refleja cada objeto, pero solo al 18%. Si es más claro, da igual; lo ve al 18%. Si es más oscuro, también lo ve al 18%. Solo lo que refleja luz al 18% lo ve bien. ¿Por qué es así? Por convención, porque sí. ¿Depende de la marca de cámara que elijas? No, es así para todas.
5.- Exposímetro
Se llama así porque es lo que nos permite exponer la escena en el material sensible, fotografiarla. Es esa escala que ves a través del visor con un valor 0 en el centro (el que representa la exposición para el 18%). Que la exposición sea correcta, más clara (sobre expuesta) o más oscura (subexpuesta), dependerá de donde realices la medición y de si la compensas o no. Hay varias posibilidades:
- Si mides en un gris medio todos los tonos caerán donde corresponden: los blancos serán blancos, los negros serán negros y, por extensión, todos los demás serán correctos.
- Si mides en un tono blanco puro sin textura, la cámara te devuelve una exposición para el 18%. Por tanto, tienes que compensar en 2 pasos y un tercio para llevar ese tono blanco a donde corresponde. Si quieres conservar textura, déjalo en 2 pasos.
- Si mides en un tono negro puro sin textura, la cámara también te devolverá una exposición para el 18%. Tendrás que compensarlo en 2,5 pasos negativos para llevarlo a donde corresponde.
- Estos ajustes pueden variar ligeramente dependiendo de la cámara, de su rango dinámico y de si disparas en RAW o en JPG. Haz pruebas.
6.- Arreglando el problema
Si la cámara ve mal, habrá que corregir el error. Para eso tenemos la apertura, la velocidad y la ISO. La apertura determina cuán grande es el agujero que hacemos en el diafragma (que se encuentra dentro del objetivo) para que pase la luz. La velocidad determina cuánto tiempo dejamos que la luz incida en el sensor (abriendo las cortinillas que se encuentran en el sensor). La ISO determinará cuál es la ratio de amplificación de la señal que vamos a aplicar (en digital la luz se convierte en una señal eléctrica en el sensor y con el valor ISO determinamos cuanto la amplificamos).
7.- Los Daños Colaterales
Subir la ISO empeora la señal ruido en toda la imagen y, en consecuencia, reduce el rango dinámico efectivo de nuestras cámaras. Es decir, peor calidad de imagen y menos contraste (diferencia entre el negro absoluto y el blanco absoluto).
La apertura. Una apertura grande (número f pequeño) deja pasar mucha luz y ofrece poca profundidad de campo. Una apertura pequeña (número f grande) deja pasar menos luz, pero se amplía la profundidad de campo. Si la apertura es muy grande (f/16 o más) pueden aparecer un problema óptico denominado difracción –también depende de la calidad del objetivo.
La velocidad. Una velocidad rápida congela el movimiento. A mayor velocidad más luz necesitarás en la escena. Una velocidad lenta registra movimiento e introduce el riesgo de trepidación –aunque también depende del pulso y de si el objetivo está estabilizado o no.
Por tanto, la apertura y la velocidad son parámetros que podemos utilizar de forma creativa. La ISO es simplemente un parámetro técnico que no tiene ningún efecto creativo al que debemos de recurrir en ocasiones de poca luz.
8.- Los Pasos
Es como se denomina a la forma de medir la luz. Cada paso duplica o divide al paso anterior o posterior, respectivamente. Se nombran de forma diferente dependiendo de si se habla de la ISO, la apertura o la velocidad.
9.- La Reciprocidad
Dada cualquier exposición, la ley de la reciprocidad dice que los pasos de luz que subas –o bajes- en un parámetro, debes compensarlo en la misma medida utilizando los otros dos en sentido inverso para mantener la exposición inicial inalterada. Esto sirve para ser creativo gracias a los efectos colaterales que producen los parámetros creativos (ver punto 6).
10.- Si estás leyendo esto ya estás perdiendo el tiempo
Tienes todo lo necesario para entender lo básico y poder seguir avanzando. Coge la cámara y haz pruebas, cambiando un parámetro de cada vez para que puedas observar y entender los cambios.
Resumiendo
Vete jugar al padel, sal, diviertete, tomate las cosas con calma; pero sobre todo llévate la cámara.
Este es un artículo arriesgado, ya que las prisas y la concentración de información, me obligan a prescindir de algunas cuestiones importantes. Pero aquí tienes las migas que guiarán tu camino.
Si tienes prisa en comenzar a realizar fotos con cierto criterio, aplica lo anterior. Vas a iniciar un camino, largo, que no tendrá fin; relájate y disfruta.
¡Ojo, no te lo he contado todo! Unas pistas:
Si yo estuviese en la situación que describo, lo haría. Si llegase al punto 10, saldría a realizar fotos. Y cuando no tuviese la posibilidad de salir con la cámara, emplearía el tiempo en aprender los pasos de luz y sus tercios para cada parámetro.
Y por último, ya sabes lo que dice el anuncio; Y si no sabes, no puedes o lo que sea, tranquilo, siempre hay...