Terminas de hacer las fotos, apagas la cámara, guardas los objetivos y vuelves a casa agotado. Pero no te vas a la cama. No, vas directo al ordenador. Metes la tarjeta de memoria y pasas todas las fotos al disco duro. Primero por seguridad, para tener una copia de las fotos cuanto antes. Y segundo, porque te lo pide el cuerpo. Necesitas echar un vistazo rápido a las fotos, quizás sólo a ésa especial que sabes que te ha salido tan bien, sólo un segundo. Y a veces, aún agotado, te dan las tantas de la noche frente al ordenador.
Te suena lo que describo, ¿verdad? Y es que el proceso fotográfico no acaba tras pulsar el obturador. El ordenador, el laboratorio de revelado del s.XXI, es el crisol en el que entrarán las fotos en bruto -los archivos RAW- y del que saldrán las fotos en las que hemos aplicado toda nuestra creatividad en un postproceso que no podemos obviar como fotógrafos. La habitación no necesita estar iluminada por una bombilla roja (aunque tengo un conocido que lo hace, sólo por nostalgia) pero tenemos la misma necesidad de revelar.
Ahora bien, ¿con qué programa procesar estos archivos? ¿Cuál es el que mejor se adapta a mis necesidades? ¿Qué diferencias hay entre ellos? Para responder a estas preguntas, voy a intentar hacer un breve resumen de los programas de revelado RAW más utilizados a día de hoy, haciendo especial hincapié en sus diferencias y puntos fuertes. Por supuesto, hay muchos más, algunos incluso gratis, pero en este artículo voy a centrarme en los más relevantes y conocidos, que son los que más gente utilizará y de los que se pueden encontrar más recursos en la web para aprender a utilizarlos como un profesional. ¡Vamos allá!
Los propios de cada fabricante
Son los que más fácil podemos obtener pues normalmente el fabricante de nuestra cámara nos los suministra en un CD, o nos permite la descarga de éstos desde su página web. Y no sólo son sencillos y gratuitos, sino que además mucha gente defiende que son los que más calidad son capaces de obtener de los archivos RAW, pues el propio fabricante es quien mejor conoce sus sensores, sus archivos y cómo procesarlos.
Tiene como desventaja que no siempre incluyen todas las opciones que querríamos y que sólo son compatibles con los formatos de RAW de su marca, por lo que si tenemos cámaras de distintas marcas o en el futuro queremos cambiar, nos tocará utilizar otro programa.
Así, Canon tendría su programa Digital Photo Professional, Nikon tendría el Capture NX-D y Sony por su parte ofrece el llamado Image Data Converter, aunque éste último es especialmente limitado en opciones.
Camera Raw
Viene integrado con la herramienta de edición fotográfica por excelencia, es decir, Photoshop. Dado que éste sólo trabaja con formatos de imagen y los archivos RAW no lo son (contienen mucha más información que solamente píxeles de colores), si intentamos abrir un RAW con Photoshop lo que nos hace es abrir a modo de antesala un pequeño programa independiente o plugin para procesar este archivo, el Camera Raw. Tras decir cómo queremos procesarlo, generará un archivo TIFF y lo mandará a Photoshop, donde ya podremos trabajar con él como un conjunto de píxeles.
Ofrece en su versión 9 muchas opciones de revelado, clasificados por módulos, entre las que se encuentran los controles sobre luces y sombras, control por colores, blanco y negro, dividir tonos, enfoque, ruido, correcciones ópticas…
El que venga incluido en las versiones recientes de Photoshop hace que no cueste dinero como tal, sino que será el precio que paguemos por Photoshop. Éste actualmente se ofrece en un plan suscripción, que en el caso de España es de 24€/mes sólo por este programa. Pero lo cierto es que no tiene sentido pagar por el programa solo, pues Adobe ofrece otro paquete que llaman Plan de Fotografía y que por 12€/mes incluye Photoshop (con Camera Raw) más otro programa aún más interesante y que vamos a ver ahora, Lightroom.
Lightroom
La suite fotográfica por excelencia, es el programa de Adobe que recoge todo el flujo de trabajo de un fotógrafo, desde la importación, clasificación y revelado RAW hasta la exportación en web, servicios de impresión, proyección… Pero a sus dos módulos principales, Biblioteca y Revelar, a mí me gusta verlos como una integración en la misma interfaz de, respectivamente, Bridge y Camera Raw.
Bridge es un programa de Adobe que sirve para importar y organizar toda nuestra galería de fotos, con opciones tan variadas como palabras clave, colores, estrellas, metadatos… Y el módulo Revelar es, como digo, un Camera Raw integrado en la interfaz de Lightroom. Tanto es así que comparten prácticamente todos los módulos, opciones, nombres y algoritmos de procesado, de manera que quien haya trabajado antes con CR se sentirá cómodo con este programa.
Destaca la posibilidad de poder trabajar por zonas, con un pincel con máscara automática, degradados lineales y radiales, la rapidez con la que sincronizar ajustes entre las fotos y, sobre todo, la comodidad de abarcar todo el flujo de trabajo necesario, pudiendo traspasar fotos de Lightroom a Photoshop y viceversa con total facilidad.
Para adquirirlo, como decía, Adobe ofrece el Plan de Fotografía donde lo incluye por 12€/mes, aunque me consta que hasta no hace mucho se podía comprar una licencia con pago único, a pesar de que actualmente no lo encuentro en la web. Para ello, la empresa diferenciaba Lightroom 6 (el programa adquirido con licencia) de Lightroom CC (el adquirido mediante suscripción).
Capture One
Tiene menos adeptos que su gran rival Lightroom, pero los que lo utilizan se vanaglorian de la altísima calidad que es capaz de extraer de los archivos. Y argumentos no le faltan. Con una interfaz muy estética y limpia, aunque quizás menos intuitiva que su homólogo de Adobe, este programa de PhaseOne, el fabricante de cámaras de formato medio, es gratuito para los poseedores de sus poderosas cámaras, aunque el resto de usuarios también puede adquirir una licencia de pago.
Ofrece también una suite que abarca todo el flujo de trabajo: importación, clasificación, revelado y exportación, con prácticamente las mismas funciones esenciales, pero de Capture One cabe destacar su modo para transmitir las fotos en tiempo real desde la cámara y de supervisión remota, y a mí me encanta su forma de gestión del color y balance de blancos, más preciosa que en LR para mi gusto.
En dzoom podrás encontrar una serie de capítulos sobre Capture One dirigidos a personas que desean aprender a usar este programa de revelado: Conociendo Capture One.
El extinto Aperture y su limitado heredero
Y le hago un hueco al veterano Aperture, pues era muy popular entre los usuarios de ordenadores Mac y, aunque quizás no era el más completo, ofrecía la mayoría de las opciones más demandadas por los fotógrafos y encandilaba por ser especialmente intuitivo y fácil de usar. Sin embargo, hace un año Apple decidió que el sector profesional no era su mercado y optó por dejar de ofrecer Aperture para dar lugar a una aplicación llamada Fotos, que se centra en la capacidad de organización y clasificación, dejando de lado las opciones de revelado que exige un fotógrafo avanzado.
Aun así, sigue admitiendo formatos RAW y puede servir para una edición sencilla y rápida para los usuarios de Mac, que lo tienen a su disposición de manera gratuita.
Por supuesto, éstos no son todos los programas que hay en el mercado para revelado de RAW, nos dejamos en el tintero programas tan potentes como Bibble Pro, DxO Optics Pro, RawTherapee… Pero sería imposible analizarlos todos. Por ello, todas las opiniones sobre los analizados y los demás programas serán muy bienvenidas.
Dime, tú, ¿con cuál te quedas?