El fondo de una fotografía es un elemento clave al que a veces no prestamos la importancia que merece. Por ese motivo, en mi búsqueda de nuevas opciones para tus fondos hoy quiero presentarte una alternativa de fondo que puede resultarte muy útil en fotografía de producto.
Se trata de un fondo basado en el papel de aluminio que utilizamos para proteger y transportar comida, sí, ya sabes, el rollo plateado que hay en tu cocina y que seguro nunca te habías planteado que podría ser un magnífico fondo para tus imágenes. ¿Quieres ver lo bien que funciona?
Algunos Fondos Sobre Los Que Ya Habíamos Hablado
Cuando digo que continuamente busco nuevas opciones para mis fondos, no lo digo por decir. En dzoom son múltiples los artículos que hemos dedicado a esta importante parte de nuestras fotografías y prueba de ellos son artículos como éstos:
- Logra Coloridos Fondos Para Tus Fotografías Con Láminas de Goma Eva
- 5 Consejos Para Conseguir Un Fondo Completamente Blanco En Tus Fotos
- Cómo Conseguir Realizar Fotografías Con Un Fondo Completamente Negro
- La Importancia de Disponer de un Buen Fondo de Armario Para tus Montajes Fotográficos
- Las 5 Claves Para Lograr El Mejor Fondo En Tus Fotografías
- ...
Como ves, esto de los fondos no es una "fiebre repentina", sino que llevamos mucho tiempo dándole la importancia que merece.
¿Qué Necesitamos Para Lograr Una Imagen Así?
Como si de un capítulo del famoso programa Bricomanía se tratase y tras haber visto en la fotografía de cabecera del artículo lo que buscamos, comenzaremos por hacer una lista de los accesorios que necesitaremos:
- Una cámara. Es obvio, pero, por si acaso :).
- Un trípode para tu cámara. Aunque no es obligatorio, te permitirá trabajar más cómodamente y repetir tomas variando ajustes, pero manteniendo el encuadre.
- Una superficie negra reflectante que utilizar como base de la composición.
- Papel de aluminio para utilizarlo como fondo.
- Un flash para iluminar el papel de aluminio y, a ser posible, un pie que permita sujetarlo.
- Un disparador remoto para el flash, salvo que el flash incorporado de tu cámara pueda enviar la señal.
Con esto tenemos cubierta la parte del fondo, lo siguiente es el sujeto principal de la composición, en mi caso he optado por un refresco, para lo que necesitaríamos:
- Un vaso, que pueda contener el refresco.
- El refresco o un líquido que lo simule.
- Hielos para dar un toque refrescante.
- Un segundo flash para iluminar el sujeto principal (con su disparador remoto). Aunque no es obligatorio, te ayudará a darte mayor control y poder obtener distintos resultados.
En la siguiente fotografía puedes ver lo que usé yo concretamente:
Como superficie una mesa de madera sobre la que puse una cartulina negra y, sobre ésta, un cristal para lograr el reflejo. El líquido era té rojo, me encanta el color que genera. Y los hielos, de plástico, así evito que se derritan, aunque he de reconocer que no están demasiado conseguidos (los hay que dan mucho más el pego en Internet, ferreterías, etc.)
¿Cómo Debemos Preparar la Toma?
Ahora que tenemos todos los elementos necesarios, es momento de distribuirlos adecuadamente. En el siguiente esquema puedes ver cómo monté yo la toma:
- Situamos la superficie que actuará de base en el punto central y sobre ella el refresco (en el gráfico aparece una maceta, lamentablemente no tienen refrescos :)).
- Tras ésta, colgamos el papel de aluminio sobre la pared posterior. Previamente, habremos arrugado un poco el papel para lograr un acabado más atractivo.
- A continuación, situamos el punto de luz secundario tras la superficie de base y enfocando al fondo. Este punto debe quedar por debajo de la superficie de base, de modo que no aparezca en el encuadre, pero que sí actúe sobre el fondo.
- Ubicamos el punto de luz principal que iluminará al sujeto enfrente de éste (misma posición que la cámara, pero con una orientación de unos 45º sobre la cámara).
- Por último, colocamos la cámara y ajustamos el encuadre y la composición de la toma hasta tener la escena que queremos retratar.
Una vez que tenemos todo esto, es momento de pasar a la fase de la toma, en la que, ¿cómo no?, también tengo algún que otro consejillo que darte. ¡Sigue atento!
¿Algún Consejo Al Disparar?
Ya estamos en la fase de ajustar parámetros de nuestra cámara, variar quizás la composición (aunque mínimamente) y disparar y disparar. En esta fase del proceso, déjame que te haga las siguientes recomendaciones:
- Sitúa el fondo a suficiente distancia del plano de enfoque como para lograr desenfocarlo adecuadamente. Si no tienes mucha distancia, tendrás que lograr desenfocar más el fondo acercándote con la cámara más al primer plano, utilizando una apertura mayor, o una focal más larga, ya sabes.
- Esmérate en que el fondo esté arrugado uniformemente, sino lo está, puede que la imagen no te dé un resultado suficientemente homogéneo (yo no fui todo lo meticuloso que debería y ahora me arrepiento, fíjate en la parte derecha de la imagen que muestro a continuación y verás a qué me refiero).
- Una vez que tengas la composición que deseas, ajusta el punto de enfoque sobre el vaso (en el punto que quieras) y pasa a modo de enfoque manual para no tener que estar ajustándolo en cada toma.
- Utiliza una focal de mínimo 50mm y con un número f no superior a f/4. Para reforzar el desenfoque que mencionábamos en el primer punto.
- Dispara con ambos flashes en manual y ve ajustando la potencia de cada uno de ellos hasta lograr el resultado deseado. El flash secundario, dada la capacidad de reflexión del papel de aluminio y la mayor cercanía de la fuente de luz secundaria al fondo que de la primaria al primer plano, deberá estar configurado a una menor potencia.
- Emplea un tiempo de exposición cercano a la velocidad de sincronización del flash para evitar en todo lo posible la participación de la luz ambiental y así controlar la iluminación sólo con los flashes.
Siguiendo estos consejos, llegué a la imagen que puedes ver a continuación y que contó con los siguientes parámetros: 50mm, f/2, 1/250 seg, ISO 100, Flash Principal: M 1/13 y Flash Secundario: M 1/128.
Un resultado del que me siento muy satisfecho y para el que, en fase de retoque, únicamente tuve que subir un poco el nivel de nitidez y contraste. Aunque, como comentaba anteriormente, sí pondría una pega: no haber arrugado un poco mejor la parte derecha del fondo (me quedó un poco raro el fondo en esa región por la falta de cuidado).
Un Vídeo Que Te Lo Dejará Todo Más Claro
La idea no se me ocurrió por arte de magia, ya que hasta ahora sólo había utilizado el papel de aluminio como reflector, pero nunca como fondo. Todo fue a raíz de ver este ingenioso vídeo en el que puedes ver un montaje similar al que yo te he planteado (con la particularidad que sólo usa flash para el fondo, dejando el primer plano sin iluminación artificial).
Salvo por el detalle de que sólo utiliza una fuente de luz, el resto de lo indicado en el vídeo es plenamente aplicable, así que creo que puede resultarte muy útil (y seguro que el que esté en inglés no es un inconveniente, porque es muy gráfico).
¿Qué?, ha quedado mucho más claro, ¿a que sí?
¡Anímate A Probarlo!
Y ahora que el artículo termina, es momento de animarte a que lo pruebes, nos cuentes tu experiencia y compartas con nosotros las fotos que has logrado con esta "técnica".
También puedes utilizar los comentarios para realizar cualquier consulta al respecto, o para recomendarnos otros posibles fondos en los que hasta ahora no hayamos caído y que puedan dar pie a nuevos y sorprendentes resultados.
¡Lánzate y cuéntanos!