Es muy posible que más de una vez, justo antes de realizar una salida fotográfica, te hayan entrado dudas sobre si llevarás todo lo necesario para tu sesión y piensas que puede que se te olvide algo importante. Si es así, necesitas hacer una checklist antes de salir de casa, sobre todo si eres principiante. En este artículo te vamos a ayudar a realizar una lista definitiva para ahorrar tiempo al preparar tu salida fotográfica y evitar que te dejes algo en casa y se pueda arruinar tu sesión.
¿Por qué es Importante Preparar Bien tu Equipo?
¿Hay algo peor que darte cuenta, justo al empezar tu salida fotográfica, de que te has olvidado algo esencial? Sin una batería cargada o una tarjeta de memoria disponible, por ejemplo, seguro que tu sesión no va a salir como lo habías planeado, y todo por un absurdo descuido.
Con el tiempo, es probable que vayas a ir adquiriendo más cantidad de material fotográfico y cada tipo de fotografía va a requerir un tipo de objetivo, el uso de un determinado filtro o la estabilidad de un trípode. Por eso es importante que tengas en cuenta qué vas a necesitar el día de tu salida fotográfica y escojas cuidadosamente el equipo que llevarás según la ocasión.
Por eso, vamos a realizar una checklist, una lista definitiva, para que no se te olvide meter nada en la mochila antes de realizar tu salida fotográfica. Mi consejo es que hagas una plantilla digital y la guardes en tu ordenador o en tu smartphone o incluso, si eres más clásico, la tengas escrita en una agenda para que la consultes siempre que estés preparando tu próxima sesión y así será casi imposible que te falte algo que necesites. ¡Toma nota!
Cómo Preparar Correctamente Todo lo Necesario
#1. Carga la Batería de tu Cámara Fotográfica
Primero es importante que la batería de tu cámara esté completamente cargada. Aunque las baterías de hoy en día tienen una alta durabilidad, es mejor que la cargues del todo y, si puedes, lleva al menos una batería de repuesto también cargada. No sabes cuánto se puede alargar la sesión que vas a realizar, por lo que llevar una batería extra te vendrá bien para estar prevenido por si te falla la primera o por si surge cualquier imprevisto.
Antes de salir, es recomendable que realices varias fotografías para comprobar que tu batería funciona de forma correcta y que, efectivamente, se ha cargado por completo. Podría haber ocurrido que el cable no estuviera bien conectado o que colocases mal la batería dentro del cargador.
Por otra parte, no está de más que de vez en cuando le eches un vistazo a la pantalla de información sobre tu batería en el menú de tu cámara. Según la marca y el modelo, te ofrecerá algunos datos relevantes sobre cuál es el estado actual de la batería que hayas introducido como, por ejemplo, el porcentaje de carga, el número de disparos realizados o la propia vida de la batería.
El mismo consejo lo deberás aplicar a las pilas si vas a precisar de materiales como un flash externo o un disparador remoto para tu sesión. Si son recargables es importante que también las cargues completamente y, como las pilas son un material ligero, lleves siempre de sobra. Piensa que algún día se podrían estropear las que usas normalmente y si no tuvieses más deberías prescindir del uso de ese material para tu sesión.
#2. Prepara tus Tarjetas de Memoria
Otro consejo básico es que compruebes que tienes localizada tu tarjeta o tarjetas de memoria ya que sin tarjetas donde almacenar tus capturas no habrá sesión. Parece una obviedad, pero suele pasar algunas veces que nos las podamos dejar puestas en el lector de tarjetas del ordenador y olvidemos sacarlas creyendo que las volvimos a colocar en la cámara. Así que es mejor que lo revises antes de irte, por si acaso.
Como dato esencial te recomiendo que pienses cuantas tarjetas vas a necesitar. Ten cuenta si va a ser una sesión larga, si vas a utilizar el modo ráfaga o si vas a disparar tus fotografías en formato RAW. En estos casos mejor que te lleves una tarjeta de alta capacidad o varias tarjetas de capacidad media. Recuerda que lo importante es que no te quedes sin espacio por lo que mi consejo es que, como ocupan poco espacio y son ligeras, lleves contigo todas las que puedas.
Lo que debes tener en cuenta antes de guardar todas las tarjetas de memoria en tu mochila, donde siempre suelen haber pequeños bolsillos o rejillas donde acceder a ellas fácilmente, es que tienes que haber descargado su contenido anterior antes de formatearlas.
Una vez estés en tu sesión, si te das cuenta de que no pasaste las fotos de sesiones anteriores y que no puedes borrarlas no tendrás espacio. Lo mejor es que antes de salir revises cada tarjeta de memoria una a una en tu cámara y compruebes que tienes una copia de su contenido en tu ordenador. Seguidamente introdúcelas en la cámara y formatéalas, así tampoco perderás tiempo borrando el contenido al día siguiente o dudando si pasaste o no esas fotos.
También es importante que, como hiciste con las baterías, hagas algunas fotografías de prueba con la tarjeta o tarjetas que vayas a usar en tu sesión y compruebes la pantalla. Las tarjetas de memoria se estropean más a menudo de lo que piensas, por lo que es mejor comprobar que una tarjeta funciona antes encender la cámara en una sesión y descubrir que está dañada.
#3. Elige solo el Material que vayas a Necesitar
En tercer lugar es hora de que pienses qué material vas a necesitar en tu sesión fotográfica, a parte de la cámara, las baterías y las tarjetas. Hay muchos accesorios también básicos (aunque no imprescindibles) que te pueden resultar realmente útiles si los llevas contigo y que no van a ocupar excesivo espacio en tu mochila: un grip, un flash externo, un parasol, un kit de limpieza o algunos filtros (UV, polarizador, densidad neutra...)
En algunos casos concretos, como la fotografía de paisaje, la nocturna o cualquier tipo de fotografía que requiera de una estabilidad extra, necesitarás también un trípode. Y si vas a realizar fotografía de retrato diurno al aire libre no te vendría mal un pequeño reflector 5 en 1 para jugar con la luz. Por eso la clave de la elección del material que vas a necesitar será tener muy claro el tipo de fotografía que vas a realizar en tu salida fotográfica.
También deberás tomar una difícil decisión, cuántos objetivos llevar. Aquí deberás aplicar la misma premisa clave: el tipo de fotografía que vas a realizar. Mi consejo es que lleves siempre dos objetivos, un objetivo zoom que te permita cubrir varias distancias focales y otro específico para el tipo de fotografía en el que pretendas centrarte.
Si vas a fotografiar paisajes puede que con tu objetivo angular y otro más tengas suficiente. Mientras que, si vas a realizar fotografía de insectos o flores, puede que solo necesites añadir a tu objetivo zoom un objetivo macro. Intenta llevar solo lo necesario, porque si coges todos los objetivos que tengas incrementarás mucho el peso del equipo que lleves.
#4. Revisa y Limpia todo tu Equipo
Seguidamente, dedica algo de tiempo a comprobar que todo tu equipo fotográfico está completamente limpio y en perfecto estado. Si realizaste tu última sesión en la playa, en la nieve o en la montaña puede que la lente de tus objetivos, los filtros, el visor o la pantalla LCD acumulen algo de polvo o manchas de nuestro propio contacto físico.
Limpia cada elemento cuidadosamente con un paño de microfibra para no dañar tu equipo, recuerda que son superficies sumamente delicadas. De esta forma tendrás tu material preparado para no perder tiempo limpiándolo en tu salida fotográfica o, peor, que se te olvide comprobar el estado de tus lentes y que luego en tus fotos aparezca esa suciedad y arruine tus capturas.
#5. Escoge la Mochila donde Transportar tu Equipo Fotográfico
Ahora que ya tienes claro todo el equipo que vas a necesitar llevar es hora de elegir la mochila fotográfica donde lo vas a transportar. Dependiendo del peso y la cantidad de material que necesites llevar contigo podrás escoger una mochila más grande o más pequeña, lo que se traduce en mayor o menor peso y más o menos comodidad.
Piensa bien la mochila que vas a escoger, porque es muy probable que vayas a tener que cargar con ella la mayor parte del tiempo y necesites arrodillarte, sentarte o incluso tumbarte con ese peso encima.
Lo esencial es que vayas cómodo y que poseas la mayor libertad de movimientos posible, sin que el tamaño o el peso de tu mochila fotográfica supongan un problema para tu equilibrio y estabilidad.
Si vas a llevar poco material o quieres pasar desapercibido, como por ejemplo en la fotografía callejera, podrás llevar una pequeña mochila corriente o una bandolera sin necesidad de llevar una funda o mochila fotográfica al uso.
#6. Comprueba los Parámetros de tu Cámara
Antes de meter todo el material dentro de tu mochila échale un vistazo a los parámetros de tu cámara. Si no estás acostumbrado a dejar tu cámara con unos ajustes neutros al terminar una sesión, es fácil que cuando la enciendas en tu próxima salida fotográfica te encuentres con unos parámetros distintos a los que vas a necesitar.
Mi consejo es que cada vez que guardes tu cámara después de una sesión te acuerdes de dejar la cámara con unos valores neutros con los que estés cómodo. Pon especial atención en ajustar parámetros como la sensibilidad ISO, el tipo de balance de blancos, la compensación de la exposición o el tipo de enfoque.
Así te asegurarás de no perder tiempo volviendo a configurar esos ajustes a la hora empezar tu próxima sesión, no te llevarás sorpresas y no perderás la posibilidad de fotografiar algo irrepetible por no haber tenido tu cámara a punto.
#7. No Olvides Otro tipo de Material Esencial
Finalmente, si tu salida fotográfica va a estar incluida dentro de una escapada o un viaje más largo, es importante que lleves contigo otros elementos que te pueden resultar imprescindibles como, por ejemplo, el cargador de las baterías de la cámara o el cargador de las pilas recargables de tu flash externo.
Si puedes llevar más peso y vas a estar fuera más tiempo, no estaría de más que te llevaras un portátil, un disco duro o un lector de tarjetas para ir pasando todo el material fotográfico que vayas a ir produciendo e ir liberando espacio de tus tarjetas de memoria y haciendo copias de seguridad para no perder tus capturas.
Otros Aspectos Importantes Antes de tu Salida Fotográfica
Ya tenemos todo el equipo preparado para nuestra próxima salida fotográfica. Sin embargo, hay otros aspectos ajenos a tu material que también es recomendable que tengas en cuenta para tener del todo controlada tu próxima sesión. No los subestimes, estos pequeños consejos te ayudarán a disfrutar de una salida fotográfica sin demasiados imprevistos.
1. Busca la Inspiración
Si estás interesado en fotografiar un paisaje o un lugar muy concreto o vas a viajar adrede a una ciudad expresamente para fotografiarla, lo más recomendable es que eches un vistazo en Internet a las fotografías que otros fotógrafos han podido hacer antes que tú.
Hacer este tipo de investigación previa puede servirte de inspiración para tomar ideas de aquí y de allá y pensar en cómo hacer tu propia versión. Así podrás estudiar el hecho de buscar ángulos diferentes y originales para marcar la diferencia y no repetir las mismas fotos que ya han hecho otros fotógrafos.
2. Planifica tu Ruta y Horarios
Si vas a hacer una salida, una escapada o un viaje lo mejor es que planifiques la ruta que vas a seguir, ya sea con un mapa físico o un mapa digital como Google Maps. De igual modo, es importante que te apuntes bien los horarios de autobuses, trenes u otros medios de transporte que vayas a necesitar. ¿Por qué insisto en esto? Pues porque, hay que reconocer que cuando nos ponemos a hacer fotos podemos perder un poco (o bastante) la noción del tiempo...
Si nos quedamos a fotografiar un bonito atardecer se nos puede hacer demasiado de noche o si seguimos ensimismados un sendero de preciosas flores nos podemos perder... Esto puede ocasionar que nos separemos del resto del grupo o que no podamos coger a tiempo un medio de transporte para volver. Ten en cuenta esas cosas y, si vas a viajar solo, permanece localizable todo el tiempo.
3. Consulta la Previsión Meteorológica
No tientes a la suerte y echa un vistazo a la previsión meteorológica antes de tu salida fotográfica. Si llegas a tu destino y hace muy mal tiempo seguramente la idea que tenías para tu sesión no pueda llevarse a cabo y tengas que improvisar o que incluso debas verte obligado a cancelarla. Por lo tanto, es mejor que no te arriesgues y consultes el tiempo en varias páginas web para asegurarte.
Si la previsión es de lluvia o nieve y aun así te arriesgas a salir, no olvides llevar todo tu equipo protegido dentro de una mochila resistente al agua y una funda impermeable para proteger tu cámara lo máximo posible. Recuerda aplicar el mismo consejo a tu atuendo, ya que además de cómodo deberá estar adaptado al clima.
4. Ponte Ropa Cómoda y Adecuada
A veces, para conseguir la fotografía perfecta un fotógrafo puede hacer casi cualquier cosa, incluso adoptar posturas imposibles. Normalmente se arrodilla, se sienta o se tumba en el suelo sin importar nada más que conseguir esa captura ideal.
Por eso, si quieres poder hacer esto, es importante que tu indumentaria sea flexible, cómoda y que puedas permitirte el lujo de ensuciarla, por así decirlo. Llevar un vestido, una falda o un pantalón excesivamente ceñido te darán poco margen de movilidad y pocas posibilidades de adoptar posturas más arriesgadas.
Obviamente, si hace mucho calor o mucho frío elige el vestuario más apropiado según las condiciones meteorológicas, como te hemos comentado en el punto anterior. Elige ropa y calzado impermeables si vas la nieve o lleva una gorra y protector solar si vas a estar bajo el sol en pleno verano.
5. Lleva algún Snack y una Botella de Agua
Aunque te parezca algo banal, te aseguro que es un consejo de lo más útil para que estés a gusto durante tu sesión fotográfica. No ingieras comidas demasiado pesadas antes de tu salida fotográfica, es mejor comer algo ligero e hidratarse lo justo antes de salir.
Si sabes que tu sesión se puede alargar más horas de lo esperado o te vas a ir un sitio alejado de la civilización puedes llevar contigo algún snack y una pequeña botella de agua. Créeme, así podrás disfrutar plenamente de tu salida fotográfica sin que las necesidades básicas te resulten un problema.
Usa tu Checklist para Futuras Salidas Fotográficas
Ahora sí, ya lo tienes todo preparado para realizar tu próxima salida fotográfica y no llevarte ninguna sorpresa desagradable al descubrir que has olvidado algo importante.
Recuerda guardar tu checklist y utilizarla para preparar tus próximas sesiones, sobre todo si acabas de empezar en el mundo de la fotografía. De esta forma te asegurarás de no dejarte nada en casa y de que tus sesiones salgan tal y como tú habías planeado.