La fotografía en obras de teatro es una de esas situaciones que se dan de vez en cuando. Situaciones sin duda complicadas, ya que los instantes que queremos recoger probablemente no se repitan y las condiciones a nuestro alrededor tampoco serán las mejores. Si estás pensando en hacer fotografías en una obra de teatro o tienes un encargo de este tipo, en este artículo te damos las claves para que puedas superar el reto lo mejor posible. ¿Te animas a hacer fotos en el teatro con nosotros?
Introducción
Hace unos días nos escribía Andrea preguntándonos por una serie de consejos para poder hacer fotos en un teatro. Las obras de teatro tienen unas condiciones muy especiales de iluminación, además de otro tipo de limitaciones de movimiento del fotógrafo que se salen de las condiciones normales en las que podemos hacer fotografías, por lo que es una disciplina a veces compleja.
Prepara tu equipo
Como siempre que sacas tu cámara a pasear en general, y cuando vas a un evento o situación que no se volverá a repetir en particular, la preparación previa del equipo es fundamental.
No olvides de preparar todo la noche anterior. Vacía las tarjetas de memoria, carga las baterías de la cámara, limpia los objetivos y los filtros, lleva las baterías y tarjetas de memoria de repuesto, ... Si te das cuenta de que te faltaba algo dentro del teatro probablemente sea demasiado tarde.
En su día preparamos un artículo en el que recogíamos un check-list para tener tu material fotográfico a punto para viajes y salidas fotográficas. Te recomiendo que lo repases y te lo lleves. Si no lo conocías, seguro que te servirá para esta ocasión y para el futuro.
Estudia el espacio y busca una buena ubicación
Cuando pienso en hacer fotos en un teatro estoy pensando en el plano más profesional del asunto, en aquellas situaciones en las que existe un orden establecido, el público está en sus butacas y puntualmente algún fotógrafo con los permisos necesarios tiene una libertad limitada para hacer una serie de fotos en ubicaciones y momentos concretos de la obra.
Analiza el espacio que tienes en el teatro, desde qué puntos podrías hacer mejores fotos y qué visibilidad tienes desde allí. Piensa en lo que quieres sacar, en las distancias focales que necesitarás para poder hacer esas fotos que deseas, y si tu objetivo dispone de esas focales para poder hacer fotos desde ese punto con garantías.
No mires solo al pie del escenario o en los laterales, y comprueba si dispones de algún anfiteatro desde el que poder sacar planos generales de la escena. Puede que en distintos momentos de la obra puedas hacer fotos desde ubicaciones diferentes.
Si se trata de una situación más informal, de tipo Festival del Colegio, la situación probablemente sea radicalmente distinta, con todos los padres con sus cámaras en un "¡Sálvese quien pueda!"
En ese caso solo podrás elegir una ubicación. Ve pronto, coge un buen sitio y cruza los dedos para que salga lo mejor posible el asunto.
Se respetuoso
Recuerda que estás en un espectáculo en el que, por un lado, hay unos profesionales (o aficionados) trabajando, que se han esforzado lo suyo para poder llegar a ese momento; y hay una serie de espectadores que quieren disfrutar de la obra sin distracciones.
Así que se respetuoso, no interfieras en la visión entre el espectador y el actor y, en definitiva, no hagas nada que haga que el centro de atención pase a ser tu persona en lugar de la obra.
Estarás haciéndolo bien si nadie se fija en ti y pasas completamente desapercibido.
Configura tu cámara
Prohibido el flash
Por motivos obvios, el flash suele estar prohibido en este tipo de espectáculos, así que no cuentes con él en esta ocasión.
Si está prohibido su uso, asegúrate de desactivar el flash de la cámara para que no se dispare accidentalmente en alguna foto. Puedes buscarte un problema y conseguir que la sesión finalice de inmediato.
Como las condiciones de iluminación no serán tan buenas como cuando hacemos fotos al aire libre, tendremos que jugar con los parámetros de la cámara para conseguir hacer buenas fotos en unas condiciones de iluminación más pobres y que nuestras fotos queden correctamente expuestas.
Prioridad al tiempo de exposición
En este tipo de situaciones me gusta usar el modo de prioridad al tiempo de exposición.
De este modo, fijo en la cámara las condiciones de velocidad que considero necesarias para que la foto no salga trepidada según la distancia focal que use y para poder congelar el instante (o recoger el movimiento dado el caso).
Al forzar el tiempo de exposición, hay que ser especialmente cuidadoso con el resto de parámetros para garantizar que las fotos salgan correctamente expuestas.
Medición de la luz
Las fotos de las obras de teatro son una de esas situaciones en las que suele funcionar mejor un modo de medición de la luz distinto del promediado, ya que se suele trabajar a oscuras y hay focos que iluminan zonas concretas del escenario. Si usamos el modo por defecto (matricial), corremos el peligro de que las zonas de más interés de la fotografía aparezcan quemadas.
Por ello, es preferible probar con modos de medición como el puntual o el promediado al centro para asegurarnos de exponer correctamente aquellas zonas de la foto que consideremos de especial interés.
Apertura
Al dar prioridad al tiempo de exposición, si la iluminación de la escena es tenue, nuestro objetivo tenderá a usar las aperturas mayores posibles (número f más pequeño).
Vigila especialmente que tu cámara no indique que con la apertura máxima la foto sale subexpuesta.
Sensibilidad ISO
Si, como decía, la apertura máxima de tu objetivo no es suficiente para exponer correctamente en los tiempos de exposición que pretendas, no te quedará más remedio que subir el ISO.
Las cámaras cada vez soportan más el ruido eléctrico y permiten disparar con ISOs altos con garantías, pero aún así es bueno que conozcas bien tu cámara para saber hasta qué ISO puedes subir obteniendo unos resultados razonablemente buenos.
Vigila el histograma
El mejor indicador que tendrás durante la sesión será el histograma.
Mantente pendiente de la representación tonal de las fotos que vayas haciendo para detectar que los parámetros de tiempo de exposición, apertura del diafragma y sensibilidad ISO son adecuados y los resultados son satisfactorios.
Un buen entendimiento del histograma y una consulta continua del mismo te evitarán disgustos posteriores cuando pases las fotos al ordenador.
Entonces, ¿qué objetivo necesito?
Como habrás podido intuir, si las condiciones de luminosidad son muy exigentes, los objetivos más luminosos son los que mejor responderán en esta situación.
Un objetivo con gran apertura no solo te permitirá hacer fotos en condiciones de menos luz sin tener que subir tanto la sensibilidad ISO sino que además te permitirá enfocar con más facilidad, ya que muchas veces la capacidad para usar el enfoque automático en condiciones de poca luz suele ser superior en objetivos luminosos.
Las fotos
Saca algún plano general
Puedes empezar con alguna foto de planos generales. Ayudarán a dar un poco de contexto a la obra, viendo como queda el escenario completo, y servirán de introducción al resto de fotos algo más centradas.
Y sobre todo detalles de la escena
Piensa en ti como espectador. ¿Cuando estás viendo una obra, en qué te fijas?
En el momento que se empieza a desarrollar, tu atención se centra en los personales. Su interacción, sus gestos, sus movimientos por el escenario, ...
Piensa en encuadres que te permitan recoger ese tipo de situaciones. La expresividad de los rostros o la expresividad de sus cuerpos se puede recoger muy bien en una foto pensando en encuadres para retratos.
Lo ideal: dos cámaras
Si te dedicas profesionalmente a esto o tienes la suerte de contar con un par de cámaras, te puede interesar hacer uso de las dos.
Con las dos cámaras preparadas podrás trabajar con focales muy diferentes teniendo ambas cámaras preparadas en función de la situación.
¿Y qué tal una cámara fija?
Si tienes un acceso privilegiado al recinto y las condiciones de seguridad son buenas, puedes plantearte dejar esa segunda cámara en una ubicación fija.
Utilizando por ejemplo un trípode y dejando la cámara preparada con un encuadre del escenario completo, puedes estar haciendo fotos a pie de escenario y disparar la cámara fija con un disparador con intervalómetro. Te permitirá cubrir el evento desde dos puntos sin necesidad de moverte de tu posición.
Los ajustes posteriores
¿Creías que tu trabajo había terminado al finalizar la obra de teatro?
Me temo que no. Dentro del flujo de trabajo deberías incluir dar un buen repaso a las fotografías en el ordenador.
Vigila especialmente la temperatura del color por si tienes que ajustar el balance de blancos.
Comprueba también el estado de las luces y las sombras de las fotos, ya que probablemente puedas hacer alguna mejora del rango tonal con el ajuste de niveles o de curvas.
En función de la sensibilidad ISO que hayas utilizado finalmente, es probable que te venga bien trabajar la reducción de ruido.
Este tipo de ajustes no te quitarán mucho tiempo y probablemente te permitan mejorar el aspecto final de las fotos.
¿Me he olvidado algo?
Puede que al preparar el artículo me haya dejado algún consejo fundamental. También es probable que tengas experiencia en este tipo de situaciones y quieras aportarla.
Si crees que puedes ayudarnos a construir y mejorar este artículo, es tu oportunidad. ¿A qué esperas? Dinos cómo podemos completarlo.
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