Siempre que hablamos de fotografía de paisaje nocturna, también conocida como nightscape photography, solemos decirte que huyas de la contaminación lumínica. No solo de la que producen las ciudades, sino también de la que produce la luna, ya que su intenso brillo enmascara muchas de las estrellas del cielo y nos impide verlo (y fotografiarlo) en su máximo esplendor.
Sin embargo, la luz que refleja la luna no siempre va a ser un problema, sino que en muchas ocasiones nos va a venir muy bien. ¿Quieres saber cómo usar la luz de la luna en tu favor?
¿Por Qué Siempre Huimos de la Luna en Fotografía Nocturna?
Cuando queremos fotografiar el cielo nocturno siempre solemos huir de la luna. Uno de los principales consejos para fotografiar estrellas es precisamente salir en noches con la luna en fase nueva (o casi nueva), o cuando la luna está en fase menguante o creciente y todavía no ha salido, o se ha escondido pronto.
Esto es porque la luna refleja la luz del sol muchísimo más de lo que vemos a simple vista y solo nos damos cuenta cuando captamos toda esa luz con nuestra cámara. Cuando la luna está en fase llena (o casi llena) y se sitúa bien alta en el cielo, la luz que refleja eclipsa la gran mayoría de las estrellas que podemos fotografiar cuando está escondida.
Y para muestra, un botón. Esta es una fotografía de la vía láctea justo antes de que la luna salga por el horizonte.
Ese brillo naranja que se percibe en el centro de la toma es la luna empezando a salir. Como ves, pude captar la vía láctea con todo lujo de detalles, gracias a la poca contaminación lumínica que había en el ambiente.
Pero fíjate ahora en esta otra fotografía, tomada un rato después, cuando la luna ya había salido completamente por el horizonte.
La vía láctea ya empieza a desdibujarse a causa de la contaminación lumínica que produce la luna, ya no se notan tanto sus formas y se pierden muchas estrellas en el cielo.
Y tienes que tener en cuenta que esa luna, pese a que en las fotografías parezca que está llena por el brillo que emite, en realidad estaba bastante menguada. Y también hay que tener en cuenta que justo acababa de salir; cuando sube a lo alto del cielo todavía eclipsa más las estrellas.
Así luce una luna llena en pleno cielo nocturno.
Como ves, si no fuera por la constelación de Orión y 4 estrellas más que brillan lo suficiente como para sobresalir, parecería que es una fotografía hecha de día. La luna brilla tanto que hasta nos ha producido un pequeño flare en la lente.
Es por esto precisamente por lo que siempre se recomienda salir a fotografiar el cielo nocturno cuando la luna está muy menguada o cuando está escondida (es decir, antes de que salga por el horizonte o después de que se haya puesto). Con la luna fuera, las estrellas que podemos conseguir captar son mínimas, sobre todo cuando está en fase llena.
¿Qué Nos Puede Aportar la Luz de la Luna en Fotografía de Paisaje?
Y, entonces, si la luz que refleja la luna oculta casi todas las estrellas del cielo nocturno, ¿por qué querríamos fotografiar de noche cuando la luna está fuera y bien alta en el cielo? ¿Qué ganamos?
Si te fijas bien en las fotografías que acabamos de ver, encontrarás la respuesta. Solo hemos analizado el cielo, y hemos visto claramente que cuanto más llena y alta está la luna, menos estrellas podemos captar. ¿Pero y qué me dices del suelo? Gracias a la luz de la luna conseguimos captar el suelo con todo lujo de detalles. Y esa es la gran ventaja que nos ofrece fotografiar de noche a la luz de la luna: iluminar el paisaje nocturno.
Si has fotografiado alguna vez por la noche, con poca contaminación lumínica, te habrás dado cuenta de que el paisaje queda completamente oscuro. Muchas veces solo podemos capturar su silueta y, si conseguimos captar algún detalle, normalmente es muy sutil y está lleno de ruido.
Pero gracias a la luz de la luna podemos conseguir fotografías de paisaje nocturnas totalmente iluminadas y muy atractivas.
Sí, perdemos la grandiosidad del cielo nocturno, pero a cambio ganamos otras cosas. Podemos captar completamente el paisaje, sus tonalidades e incluso sus texturas. Algo impensable si la luna está escondida.
Incluso aunque intentes iluminar con lightpainting el paisaje, las linternas (o flashes) tienen un límite. Nunca podrán iluminar por completo un paisaje grande o una montaña lejana.
Y, además, la iluminación que produce la luna queda mucho más natural y homogénea que una iluminación hecha con lightpainting.
Así que, sin duda, si tu intención es captar la grandiosidad de un paisaje nocturno y no solo del cielo, fotografiar bajo la luz de la luna puede ser tu mejor opción.
Un Poco de Inspiración
Ahora que ya has visto las ventajas de salir a fotografiar en noches con luna, te dejo unas cuántas fotografías que espero que te sirvan de inspiración y motivación.
1. Yosemite Valley
Con estas fotografías podemos ver claramente otro ejemplo del mismo lugar fotografiado sin luna y con ella. Obviamente el cielo es más espectacular en la fotografía sin luna, el fotógrafo incluso ha conseguido captar el fenómeno conocido como airglow o luminiscencia nocturna.
Pero, a cambio, pierde casi por completo todo ese paraje montañoso tan impresionante que sí podemos apreciar perfectamente en la otra fotografía realizada en una noche con luna.
2. En la Cumbre
Así como en las fotografías nocturnas de estrellas el absoluto protagonista de la captura es el cielo, en este tipo de fotografías nocturnas a la luz de la luna el protagonista debe ser el paisaje. Si centras el protagonismo en el cielo, no obtendrás resultados satisfactorios. Olvídate de que estás fotografiando el cielo nocturno; lo que estás fotografiando es un paisaje nocturno, un nightscape.
Eso es lo que ha hecho el autor de esta fotografía, se ha centrado en la composición para captar la grandiosidad del paisaje e incluso le ha dado protagonismo a la vegetación del primer término, que pasaría totalmente desapercibida si no estuviera iluminada por la luna.
3. Arcoíris Nocturno
La luz de la luna nos ayuda a iluminar paisajes enormes, que de otra manera no podríamos iluminar por la noche. E, incluso, puede llegar a producir arcoíris si es lo suficientemente potente, como es el caso de esta fotografía. Increíble, ¿verdad?
4. Startrails a la Luz de la Luna
Que la luz de la luna eclipse las estrellas no significa que no podamos darle un toque de interés al cielo nocturno. Muchos fotógrafos optan por "adornar" el cielo creando un bonito startrails.
Imagina esta fotografía con todo el paisaje oscuro, el startrails no tendría ni la mitad de gracia. Sería simplemente una silueta de montañas negras con un cielo interesante. Pero gracias a la luz de la luna obtenemos un precioso paisaje nocturno y, además, un cielo atractivo. ¿Qué más se puede pedir?
5. Northern Lights
Otra opción para tratar de otorgarle más interés a nuestro nightscape es buscar reflejos en el agua. Gracias a la luz de la luna, podremos captarlos con todo lujo de detalles. Con todo el paisaje a oscuras no conseguiríamos captar un reflejo interesante de las montañas, tan solo de las estrellas más brillantes.
En esta fotografía, además, vemos una increíble aurora boreal surcando el cielo nocturno (y su reflejo en el lago). Aunque la luz de la luna haga que no podamos fotografiarla en todo su esplendor, sin duda el paisaje iluminado compensa con creces que la aurora se capte de forma más leve.
6. Abandoned Ship
La luz de la luna no solo nos sirve para iluminar paisajes, sino cualquier elemento al que queramos sacarle un buen detalle aunque sea de noche.
En esta fotografía vemos como, pese a tener un cielo nocturno más bien soso a causa de la contaminación lumínica que produce la luna, el autor ha conseguido captar todos los detalles y las texturas de este barco abandonado.
¿Se podría haber iluminado con linternas usando lightpainting? Sí, aunque la iluminación no hubiera quedado tan natural y homogénea como en esta fotografía. Además, normalmente a un barco varado no se puede acceder, así que la iluminación hubiera venido desde abajo, haciéndola todavía menos natural, y probablemente no hubieran llegado a iluminarse bien las partes más altas y alejadas del barco.
Un Ejemplo Práctico
Y para terminar, quería mostrarte un ejemplo práctico, el de la fotografía de portada de este artículo.
Esta cala es una de mis calas favoritas, Cala Canyet, por la pasarela de piedra que une toda la zona de rocas que se adentra en el mar. Sin embargo, cuando intenté fotografiarla por la noche, toda esta pasarela de piedra se perdía entre las sombras. Aunque sí es cierto que podía conseguir un cielo más espectacular con la luna escondida, la parte que más me atraía de este paisaje pasaba totalmente desapercibida.
Intenté aclarar un poco las sombras en la edición, para ganar algo de detalle en el paisaje, pero cuanto más las aclaraba más ruido ganaba la fotografía. Así que al final todo el paisaje quedó mucho más oscuro de lo que me hubiera gustado.
Así que decidí volver otro día con la luna fuera, ¡y la estampa era totalmente diferente!
Si bien es cierto que no pude captar muchas estrellas en el cielo, la luna me ayudó a iluminar todo el paisaje. Ahora sí se podía ver perfectamente toda la pasarela de piedra entre las rocas, y algo todavía mejor que ni siquiera me había planteado: el color del agua del mar.
El mar de la Costa Brava siempre me ha atraído mucho por sus tonalidades turquesas, pero claro esos colores solo se ven a plena luz del día. Por la noche se apagan totalmente y el agua se ve muy oscura. Pero con la luz de la luna sí conseguí capturar todas esas tonalidades que tanto me encantan del mar, y eso fue un plus increíble para la fotografía.
Por otra parte, el cielo, al igual que el agua del mar, también se ilumina y muestra un precioso color azul, que se pierde en las noches sin luna. Si te fijas en la primera fotografía, el cielo queda mucho más negro. Es cierto que mucha gente trata de azularlo usando un balance de blancos frío, pero esto es un error ya que se estropean las tonalidades naturales del cielo nocturno y de la vía láctea, tal y como te contábamos en el artículo "Aprendiendo de los Errores: Cómo Mejoré la Edición de esta Vía Láctea de 2017".
Además, esa noche había algunas nubes que me ayudaron a conseguir un cielo más atractivo, ya que las estrellas que podía captar eran más bien pocas. Al disparar una larga exposición conseguí que crearan una bonita traza, y gracias a la luz de la luna se iluminaron de un blanco intenso y quedaron muy bonitas también.
Así que, como ves, en este caso la luz de la luna me ayudó a conseguir una fotografía nocturna mucho más bonita y atractiva.
¿Te Animas a Fotografiar Bajo la Luz de la Luna?
Ya has visto que no siempre es recomendable huir de la luna cuando salimos a practicar la fotografía nocturna. Todo dependerá de lo que estemos buscando.
Si lo que buscas es conseguir una fotografía increíble del cielo nocturno, sin duda sí, deberás evitar la luz de la luna. Pero si, en cambio, estás tratando de captar un gran paisaje nocturno, la luz de la luna te ayudará a iluminarlo y a transmitir su grandiosidad con todo lujo de detalles.
¿Y tú? ¿Te animas a fotografiar a la luz de la luna?