Cuando salimos al exterior a hacer una sesión de retrato siempre intentamos prestarle atención a una serie de detalles: nos fijamos en la pose del modelo, en la luz, en los tipos de plano que más lo favorecerán... pero hay algo que siempre se nos suele escapar: el fondo. ¿De verdad le prestas la atención necesaria? Un mal fondo puede estropear lo que podría ser un gran retrato. En el artículo de hoy te enseñaré algunos de los mejores trucos para que aprendas a sacar buenos fondos en tus retrato en exterior. ¿Te quedas a descubrirlo?
La Importancia de un Buen Fondo
Uno de los componentes que conseguirán que tu fotografía de retrato sea más profesional es un buen fondo. Normalmente nos centramos en que el sujeto de nuestra fotografía salga bien y destaque sobre los demás elementos, porque es el protagonista de la toma. Pero un mal fondo puede estropear incluso el mejor de los retratos.
El fondo puede actuar o bien como un entorno desapercibido que no tiene que robarle protagonismo al sujeto, o como un entorno que en parte lo define y que cobra cierta relevancia en la toma. Sea cual sea la opción que escojas para tu retrato, deberás cuidarlo y conseguir cierta cohesión entre el elemento protagonista y ese fondo.
¿Pero qué entendemos por fondo en fotografía? Te lo contábamos con detalle en este otro artículo. Podemos decir que una imagen se divide en tres componentes:
- El marco. Establece los límites de la imagen.
- El espacio positivo. Es el elemento protagonista de la toma, la figura. Tiene que destacar sobre los demás elementos para conseguir que quien observe la fotografía lo perciba primero.
- El espacio negativo. Es el resto de la fotografía, es decir, el fondo. Es la parte de la toma que no es pertenece al espacio positivo. Lo que resta.
¿Cómo Encuentro un Buen Fondo?
Tras conocer qué es el fondo y que relación tiene con la figura o elemento protagonista de la toma, veamos algunas cuestiones que deberemos tener en cuenta para cuidarlo.
1. ¿Qué Lente Usarás?
Como te decía antes, hay dos formas de hacer un retrato en cuanto a la relación entre el sujeto y el fondo se refiere. La primera de ellas es hacer un retrato en el que el entorno tenga cierto protagonismo en la imagen, pero no sólo por lo bonito que pueda ser, sino también porque la fotografía tiene cierto toque documental o está orientada a la moda, por ejemplo. Para estos casos lo ideal es utilizar una lente angular o gran angular, procurando que la configuración de nuestra cámara esté orientada a destacar al sujeto de la toma, pero dejándole cierto protagonismo al fondo.
La segunda forma es cuando queremos destacar al sujeto y que el fondo pase parcial o totalmente desapercibido. Para estos casos una focal fija, como es el famoso 50 mm, o una focal larga serán las lentes que mejor resultados nos den, ya que con ellas aislaremos al retratado del fondo.
Lo que está claro es que a una misma sesión puedes llevarte focales distintas y experimentar. Habrá tomas que pueden ser más descriptivas con un entorno identificable, y otras en las que quieras que toda la atención recaiga sobre el sujeto.
2. ¿Desde Dónde Incide la Luz?
¡La luz! ¿Cuántas veces te habremos hablado sobre la importancia que tiene ésta en fotografía? ¿Y de cómo trabajar con ella para mejorar nuestros retratos? Es evidente que tiene un papel fundamental, pero no sólo tienes que fijarte en qué luz le incide a nuestro sujeto, sino también al fondo sobre el que está el sujeto, ya que dependiendo de cómo y cuánto esté iluminado, puede distraer la atención de lo que verdaderamente importa: nuestro retratado.
Tenemos que tener en cuenta la hora del día en la que trabajemos si vamos a aprovechar la luz natural del sol. Y podemos clasificar dichos momentos en tres.
- Amanecer/atardecer. El momento en el que tendremos una luz más favorecedora es durante el amanecer y el atardecer. En ese momento el sol estará situado muy próximo al horizonte, otorgándonos una luz más cálida y suave que favorecerá a nuestro retratado, y que nos brindará fondos con tonos suaves y anaranjados que bien pueden estar difusos, o reconocerse claramente.
- Horas centrales del día. Durante estas hora la luz de la que dispondremos será muy dura y provocará sombras que, al no ser que vayamos buscándolas, no son muy favorecedoras para nuestro retrato. ¿Significa eso que no debemos hacer retratos durante estas horas? ¡Para nada! Siempre podemos aprovechar la sombra para encontrar una iluminación más favorecedora para nuestro modelo, y dejar o no dejar iluminado el fondo para crear contraste o no.
- Días nublados. Los días nublados son días idóneos para la fotografía de retrato. ¿Por qué? Porque evitaremos los fuertes contrastes, y las sombras duras. De este modo crearemos un retrato mucho más suave y difuso en cuanto a luz se refiere, tanto para el sujeto como para el fondo.
Piensa que por norma general trataremos de que el fondo y el sujeto tengan unas condiciones lumínicas similares. Si el fondo está más iluminado que el sujeto, éste quedará sobreexpuesto o tendremos que subexponer a nuestro retratado, lo cual no suele ser una opción recomendable. Por otra parte, si es el sujeto el que está más iluminado que el fondo esto no tiene por qué ser un problema, ya que crearemos contraste y nuestra mirada se dirigirá a la parte más iluminada que es nuestro modelo.
Si quieres conocer más consejos para trabajar con luz natural en exteriores y conseguir buenos retratos, no dejes de leer este artículo.
3. Recopila Buenos Fondos en Tu Móvil
Imagina que estás paseando un día cualquiera por una calle cualquiera. Estás andando y de repente encuentras un rincón que te hace pensar en el acto en que actuaría como un fondo estupendo para alguno de tus retratos.
Si no quieres que se te olvide cómo era el lugar o dónde está, puedes hacer uso de tu móvil y hacer una captura del lugar e incluso guardarte la ubicación en la que se encuentre para que puedas volver al lugar exacto en el futuro.
7 Consejos para Mejorar los Fondos de Tus Retratos
Una vez hechas estas cuestiones, ¿qué consejos podemos seguir a la hora de mejorar los fondos para nuestros retratos?
1. Fuera distracciones
Menos es más. Quédate con estas palabras porque las oirás mucho en fotografía. En este caso, si queremos hacer un retrato en exterior, tenemos que conseguir que nuestro modelo destaque, y que si el fondo es relevante se distinga, pero con los elementos justos, no más.
Apuesta por la sencillez. Y para ello será importante que procures no atiborrar el encuadre de elementos que no dicen nada. Busca el ángulo adecuado, utiliza la focal que te ayude a lograrlo y procura que tus fondos sean neutros en el caso de que no sean relevantes.
2. Sácale provecho a la poca profundidad de campo
Si hay un truco que nos ayudará a destacar a nuestro sujeto del fondo es utilizar una escasa profundidad de campo. Si abrimos el diafragma de nuestra cámara, lograremos que el fondo se difumine, y eso nos ayudará a dirigir nuestra mirada directamente a la persona retratada.
Además, de este modo conseguiremos buenos fondos hasta en los lugares menos indicados. Eso sí, al no ser que busques otra cosa, recuerda siempre fijar el foco en los ojos del modelo para que tu retrato tenga mayor expresividad.
3. Aleja al sujeto del fondo
En la línea del anterior punto, si hacemos memoria recordarás que una de las variables de la profundidad de campo era la distancia del sujeto respecto a la cámara (y también respecto al fondo). Cuanto más alejado esté el sujeto del fondo más difuso saldrá este ayudándonos a concentrar la atención sobre el modelo.
Uno de los errores más repetidos entre los principiantes es indicarles a los modelos que se sitúen pegados al fondo. De este modo tendremos todos los elementos prácticamente en la misma zona de enfoque. Si el fondo encima es muy vistoso, le restará totalmente el protagonismo al modelo. Así que ya sabes, pon distancia entre ellos para conseguir mayor contraste y definir bien el elemento importante de la captura.
4. Cuida los colores del fondo
Los colores en fotografía también captan nuestra atención, por eso si hablamos de fondos, habrá que saber combinarlos con los colores que lleve nuestro modelo vestido, para que no le roben protagonismo a éste.
5. Experimenta con la perspectiva
La perspectiva es esencial en fotografía. Un truco sencillísimo que puede cambiar totalmente el resultado de nuestras fotos, incluidos los retratos. Si compruebas que el fondo desde la perspectiva que estás disparando la foto no te atrae, prueba a moverte ligeramente. Un fotógrafo no puede quedarse inmóvil. Agáchate, gírate, varia tu ángulo... verás como un simple cambio de perspectiva te brinda resultados que cambiarán totalmente el resultado.
Si aún así no consigues lo que deseas, prueba a mover también a tu modelo.
6. Apaga los fondos
Por último, dirige la mirada hacia el sujeto gracias a la luz. Ya sea aprovechando la luz natural o artificial, si consigues que ésta se concentra en tu sujeto, y éste esté lo suficientemente separado como para que la luz no le llegue, tu fondo se quedará más apagado, y eso hará que tu mirada vaya directamente a tu sujeto.
7. ¿Y si no tenemos un buen fondo? ¡Rellena el encuadre!
Por norma general con los trucos anteriores conseguirás que tu fondo sea el adecuado. Pero... ¿Y si ninguno de ellos te funciona? No te desesperes. Aun nos queda una opción. ¡Rellenar el encuadre! Aprovecha para realizar primeros planos y no dejes que el fondo estropee tu retrato.
4 Buenos Fondos para tus Retratos en Exterior
A continuación voy a hablarte de 4 lugares que pueden ser localizaciones ideales para conseguir buenos fondos en tus retratos. Por supuesto, no solo son buenos estos, sino que existen muchísimos más.
Fondos en la Costa
La costa es una de las localizaciones que nos va a brindar fondos más espectaculares para nuestros retratos. Desde una playa con un mar plácido, un puerto con sus barcas, o hasta un cala rocosa en la que chocan las olas. Dependiendo de lo meteorología, y del momento del día, ese fondo podrá cambiar completamente, así que estudia la localización y escoge en qué momento del día tendrás la luz que deseas para tu captura.
Fondos en el Bosque o el Campo
Otro de las localizaciones más recurrentes para encontrar buenos fondos son los bosques de la montaña o un prado en el campo. Piensa en estaciones como son la primavera o el otoño, y los preciosos colores que podemos encontrar en ellos.
Por ejemplo, en un campo lleno de flores puedes jugar con focales fijas o focales largas y desenfocar las flores que tengas en primer término, y también el fondo.
En un bosque tendrás que estar pendiente de la luz, y de los contrastes que ésta puede crear al atravesar los rayos las copas de los árboles. Un contraluz o buscar la sombra serán nuestras mejores opciones.
Fondos en la Ciudad
En la ciudad tenemos multitud de fondos excelentes para nuestros retratos. Por ejemplo, los edificios, sus líneas y sus texturas pueden ayudarnos a conseguir fondos para nuestros retratos muy originales. Estaciones de tren, edificios antiguos, e incluso edificios que puedan haber abandonados pueden convertirse en un telón de fondo estupendo. Incluso si te gustan más los retratos nocturnos, una feria con sus múltiples y coloridas lucecitas puede ser un fondo fantástico.
Fondos en los Grafitis
Y por último tenemos uno de los fondos más coloridos: los grafitis. El color que aportan a nuestra toma puede darle a nuestro retrato un toque especial. Como decíamos antes, puedes hacer que ese fondo salga nítido, o que salga parcialmente desenfocado.
¡Encuentra tu Propio Fondo!
Como has podido comprobar, planificar tu próxima sesión de retrato es de vita importancia. Es mejor analizar la localización y estudiarla un poco antes de lanzarse a disparar a lo loco. De ese modo conseguiremos que los fondos de nuestros retratos en exterior sean coherentes, y que acompañen o hagan destacar a nuestro modelo.
¡Cuéntanos! ¿Dedicas tiempo a analizar los fondos de tus fotografías? ¿Tienes algún lugar favorito para encontrar buenos fondos? ¡Nos encantará leer tu respuesta en los comentarios!