Hoy no voy a hablar sobre fotografía estrictamente hablando, sino más bien del material que se necesita para poder hacer fotografía de paisaje y obtener los mejores resultados posibles.
Dentro de la fotografía de naturaleza existen diferentes áreas en las que uno puede especializarse. Yo, en concreto, suelo decantarme por la fotografía de paisaje, y a lo largo de los años he ido viendo qué tipo de material me ayuda más o menos a conseguir las fotografías que andaba buscando y a resolver situaciones complejas.
Objetivo Gran Angular
Lo primero que se me ocurre que puede necesitar un fotógrafo de paisaje es un objetivo gran angular. Estos objetivos, como su nombre indica, tienen un gran ángulo de visión, por lo que abarcan gran cantidad del paisaje. Los objetivos gran angular abarcarían desde 16mm hasta 35mm de focal. Otra ventaja que tienen estos objetivos es que tienen una profundidad de campo muy alta, con lo que es muy fácil conseguir que todo aparezca nítido.
El Trípode
Otro elemento indispensable, ya no sólo en paisaje, sino en naturaleza en general, es el trípode. Para conseguir estabilidad de manera que la cámara no se mueva, es ideal usar un trípode pesado. Lo malo de esto, es que normalmente, el fotógrafo de paisaje tiene que realizar largas caminatas, por lo que el peso es un hándicap.
El trípode es importante sobre todo cuando la luz es escasa, pero no sólo por eso. Cuando fotografiamos un paisaje normalmente queremos que todo aparezca nítido y enfocado, además de querer obtener la máxima calidad posible.
Los objetivos suelen dar la máxima calidad a diafragmas cerrados, y suele variar entre f8 y f9, normalmente. Si quieres conocer el "punto dulce" de tu objetivo sólo tienes que buscar las gráficas MTF del modelo en cuestión, aunque ya adelanto que no es sencillo interpretarlas.
Sabiendo esto, no es normal que a la hora de disparar el diafragma esté como mínimo a f8, llegando muchas veces a f16 o f22 para conseguir enfocar el sujeto de primer plano y el fondo.
Nota: ojo con cerrar el diafragma a tope (f22) puesto que llega un momento en el que la calidad disminuye debido al efecto de la difracción.
La Rótula
Aparte del trípode, hay que tener en cuenta el tipo de rótula, que es como si fuera el cabezal del trípode, donde se monta la cámara. Existen distintos tipos, aunque después de haber probado la de bola me quedo con la de 3 ejes. El motivo es sencillo, este tipo de rótula dispone de tres manecillas que puedes liberar o fijar de manera independiente, por lo que puedes fijar un eje sin perder los otros dos. En mi caso utilizo una rótula muy básica de Manfrotto, la 804RC2.
Un accesorio que puede ser útil es una especie de burbuja que se coloca en la zapata de la cámara, que sirve para saber si tenemos fijado el horizonte recto. En mi caso, mi cámara dispone de un nivel digital.
El Disparador o Intervalómetro
Seguimos haciendo hincapié en la calidad de nuestras fotografías, por lo que si vamos disparar con trípode es recomendable utilizar un disparador. El motivo es sencillo, si pulsamos directamente sobre el botón de la cámara, es posible que la foto salga trepidada, es decir, movida y con falta de nitidez.
El disparador suele tener función de intervalómetro, es decir, que podemos configurarlo para que dispare un número de fotos concretas, o lo más habitual, el tiempo de exposición. La mayoría de intervalómetros tienen las mismas funcionalidades, por lo que cualquiera vale. En mi caso utilizo uno clónico, ya que el original cuesta mucho más.
Los Filtros
Ahora ya tenemos todo montado, sólo nos falta disparar. Pero resulta que la mayoría de veces disparamos en condiciones de luz complejas, como son la hora dorada, o la hora azul. Así que no nos queda más remedio que utilizar filtros.
A la hora de usar filtros puedes utilizar un portafiltros, de manera que una vez los colocas ya tienes las manos libres. La otra opción es aguantarlos a mano, permitiendo realizar distintos movimientos para realizar tapados en las zonas de más luz. Esta técnica se utiliza en situaciones complejas y requiere de mucha práctica.
Hasta ahora siempre utilizaba el portafiltros de Lee, sin embargo, hace poco que vengo usando el de LucrOit. Uno de los motivos es que dispone de una especie de viseras que evitan que los rayos del sol entren por los laterales, creando flares espantosos.
Como comentaba en el artículo sobre los filtros, el polarizador es imprescindible para fotografiar paisaje, puesto que elimina la luz reflejada sobre los objetos, consiguiendo un efecto de color más saturado. Es recomendable comprarse uno de buena calidad. En mi caso, hace poco adquirí una marca que desconocía llamada Marumi, que consigue obtener una calidad comparable a los B+W a un precio mucho más asequible.
Pero los filtros estrella son los degradados de densidad neutra. Si no quieres tener que hacer varias fotografías y juntarlas después en el ordenador, es obligado utilizar filtros para contrarrestar las diferencias de luz. La marca Lee dispone de infinidad de modelos de todo tipo, aunque están hechos de gelatina, eso sí, como la mayoría. En mi caso tengo un filtro degradado soft de 2 pasos y otro de 3.
También tengo un par de filtros degradados inversos, aunque en este caso de la marca Hitech. Respecto a esta marca, he leído muchos comentarios y opiniones de todo tipo, sobre todo por la dominante de color que deja en las fotografías. Yo creo que dependiendo del filtro esa dominante varía. En mi caso estoy contento, y la pequeña dominante que pueda dejar me gusta.
Estos filtros son ideales cuando estás fotografiando el mar, ya que la zona del horizonte es la que más luz tiene, aunque tiene muchas más aplicaciones.
Si quieres conseguir el efecto seda en cascadas, o en el mar, necesitarás un filtro de densidad neutra. Cuando hay poca luz utilizo un filtro circular de 4 pasos para conseguir aumentar aún más el tiempo de exposición. Sin embargo, por el día utilizo el filtro Big Stopper de Lee, que resta 10 pasos. Estos filtros son de cristal, con lo que duran más tiempo y no suelen tener dominante de color. Tengo que decir que he probado el filtro Firecrest de Hitech y los resultados en ciertas condiciones superan al Lee, tanto en dominante de color como en viñeteado.
Por lo que se refiere al material estrictamente fotográfico, si dispones de todo lo que he dicho más arriba no hay duda de que puedes conseguir fotos de paisaje realmente increíbles.
Material no fotográfico
No hay que olvidarse del equipo no fotográfico. Es importante que cuando estamos en medio de la naturaleza estemos bien equipados, por lo que pueda suceder. Lo primero es abrigarse bien, ya que de lo contrario iremos con prisas y tendremos ganar de irnos. Así que hay que llevar una buena chaqueta, unos guantes, y si me apuras una braga para el cuello y si estamos en la montaña un gorro.
Por último, decir que hoy en día existen multitud de aplicaciones para móviles muy útiles que nos ayudarán a la hora de realizar nuestras fotografías, pero esto lo dejamos para el siguiente artículo.