La fotografía no tiene por qué ser siempre realista. Puede servirnos también como diversión y ayudarnos a crear curiosos y originales efectos visuales.
Es lo que ocurre con el ejemplo que te voy a mostrar hoy: fotografías de pequeños planetas, también conocidas como panorámicas de 360º o panorámicas circulares.
Si quieres descubrir qué son y cómo puedes hacerlas tú mismo, quédate conmigo y te enseñaré a crear paso a paso tu propio planeta. ¿Te apuntas?
¿Qué Es una Panorámica Circular?
Aunque no hayas escuchado alguno de los términos por los que se identifica a este tipo de creación fotográfica, como son panorámica circular o de 360º, o pequeño planeta o tiny planet en inglés, seguramente sí que has visto alguna de estas imágenes en Internet.
Como ves, y en general, se trata de paisajes o skylines de ciudades, que gracias al uso de Photoshop, podemos convertir en un pequeño planeta, creando así una imagen bastante original.
Solamente necesitas tener una imagen panorámica, y Photoshop y los pasos que a continuación te indicaré, harán el resto.
¿La Puedo Hacer con Cualquier Panorámica?
Para conseguir tu pequeño planeta puedes utilizar, por normal general, la mayoría de las panorámicas. Sí que te recomiendo que si no creas una específica para probar el efecto, busques una en la que el principio y el fin de la imagen sean similares para poder unirlas de forma coherente después. De no ser este el caso, te tocará clonar algunas partes de la imagen para disimular el corte.
También es recomendable que en tu panorámica haya un horizonte claro, y se vea parte del cielo. Ten en cuenta que si incluyes elementos que sobresalen de la parte superior de la imagen, como son árboles o edificios, puede que en algunos ejemplos concretos no funcione del todo bien. Pero no te rindas, se trata de probar e ir mejorando, al fin y al cabo, las reglas de tu pequeño planeta las marcas tú.
Sí que te aconsejo que aunque no sea con la primera prueba, realices una panorámica de 360º para realizar el ejercicio, porque de esa manera te darás cuenta de que tendrás cubiertos todos los ángulos, y te será más fácil unir las imágenes y crear nuestro pequeño mundo cuando lo trabajemos en Photoshop.
Por último, si necesitas algunos consejos a la hora de tomar las fotografías que conformarán nuestra panorámica, te recomiendo que le eches un vistazo al siguiente artículo.
Los Pasos para Conseguir Nuestro Pequeño Planeta
Supongamos que nos hemos decidido por salir a fotografiar una panorámica de 360º para llevar a cabo el experimento. Veamos qué pasos debemos seguir en Photoshop tras la captura de las tomas, para obtener nuestra imagen.
Para empezar, lo primero que deberemos hacer es pasar las fotografías de nuestra panorámica al ordenador. ¡Y atento! Para este caso, y sobre todo dependiendo de la cantidad de fotografías que hayas hecho para generar tu panorámica, te recomiendo que utilices los archivos en JPEG y no en RAW. ¿Por qué? Pues porque cuando vayáis a unir la panorámica en Photoshop os daréis cuenta de que la unión de las imágenes va a ser un proceso bastante lento, así que si lo hacéis con archivos RAW imaginaos lo que puede llegar a tardar.
Una vez tenemos pasados los archivos JPEG a nuestro ordenador, nos iremos a Photoshop y entraremos en la pestaña de Archivo/Automatizar/Photomerge. Este paso seguro que lo conocías, es lo que hacemos para montar cualquier panorámica en Photoshop.
A continuación, añadiremos todas las imágenes que conformarán nuestra panorámica. Para ello, le daremos al botón de Explorar, y seleccionaremos las fotografías. Tras la selección, y dejando la composición automática, le daremos a Ok.
Ahora es el momento perfecto en el que podéis dejar el ordenador trabajando e iros a tomar un buen café, porque el proceso va a durar un rato considerable. Cuando haya terminado, veréis que vuestra panorámica ya está creada. Es el momento de recortarla y ajustar sus límites. Para ello usaremos la herramienta de Recortar.
Una vez recortada la imagen, os recomiendo que o bien combinéis todas las capas del documento, o presionéis las teclas “Control+Shift+Alt+E” para generar una nueva capa en la que se sumen todas las anteriores.
Es normal que puedan aparecer pequeños fallos al montar la panorámica, y uno de los más destacados en mi caso, era la proyección de mi sombra en el suelo. Pero gracias a las infinitas posibilidades de nuestro amigo Photoshop, no es nada que no se pueda solucionar a base de algunos “clicks”. Con la herramienta de Pincel corrector puntual mi sombra desaparece de inmediato.
Ahora que ya tenemos montada la panorámica, es el momento de empezar con los pasos que nos ayuden a crear nuestro pequeño mundo.
Para comenzar, nos iremos a la pestaña de Imagen/Tamaño de imagen, y le daremos un formato cuadrado. Esto lo haremos porque de esta manera no quedarán tan desproporcionados los elementos que componen la imagen una vez hayamos construido el pequeño mundo. Para ello, recuerda deshabilitar la opción de Guardar proporciones (el candado), y asígnale el mismo tamaño de ancho que de alto.
Si quieres que tu pequeño mundo tenga la misma vista que la imagen que aparece en la portada del artículo, entonces ahora será el momento de invertirla. Para ello tendrás que entrar en la pestaña de Imagen/Rotación de la imagen/180º.
Si no lo haces, entonces tu mundo se generará del revés, tal y como aquí se observa. Según el tipo de foto, también puede crear un efecto muy curioso.
Por último, ha llegado el momento de la verdad. Ahora solo te falta entrar en la pestaña de Filtro/Distorsionar/Coordenadas polares. Le damos a Ok simplemente, y ¡Voilà! ¡Tenemos nuestro planeta!
Los Últimos Ajustes
Ya tenemos nuestro planeta, ahora tendremos que recortar de nuevo la imagen y ajustarla, para evitar que salgan algunos fallos que se generan en las esquinas de la imagen. Otra opción es que con el Pincel corrector puntual o la herramienta de Rellenar, trates de corregir esas zonas.
Y por último, si le das un poco de contraste y saturación a tu imagen, puede que luzca un poco más. Solo te queda guardar la imagen y presumir de los resultados.
¿Qué te ha parecido? Lo cierto es que es un ejercicio bastante sencillo y que está caracterizado por lo curioso que es su resultado. ¿Te ánimas a crear tu pequeño mundo? ¡Nos encantará ver el resultado!