A estas alturas del partido ya sabemos muy bien que la iluminación es una pieza fundamental en fotografía, y que sabiendo trabajarla bien podemos lograr que imágenes simples se conviertan en una auténtica obra de arte. Pero dominar la luz no es fácil, esta tiene muchas propiedades que hemos ido viendo a lo largo del tiempo, que tenemos que conocer y entender para poder trabajar con ellas.
Hoy quiero hablarte de un tipo de iluminación en concreto, el contraluz. ¿No sabes lo que es? Pues quédate conmigo y déjate fascinar por la magia que puedes conseguir con este tipo de luz.
¿Qué Entendemos por Contraluz?
Seguro que el término contraluz lo has escuchado más de una vez cuando se habla de iluminación fotográfica. También puede que lo conozcas como luz de fondo o incluso retroiluminación, y sencillamente se trata de un tipo de luz que ilumina a nuestro sujeto desde detrás, y no desde delante.
Esto puede parecer un poco confuso, ya que normalmente cuando queremos arrojar luz sobre un sujeto u objeto lo hacemos por delante o desde algún lado para que aparezca lo suficientemente iluminado, ¿verdad? Veamos cuáles son las diferencias para comprenderlo.
Hablamos de luz frontal cuando la fuente de luz se sitúa delante del sujeto y proyecta en el fondo (si este está cerca) la sombra del objeto o sujeto fotografiado, tal y como aparece en el gráfico. Con este tipo de iluminación logramos una luz uniforme que nos muestra todos los detalles de aquello que aparece en el encuadre.
Por contra, cuando hablamos de contraluz o luz de fondo, las posiciones de la fuente de luz y el sujeto si intercambian, de manera que la fuente de luz ilumina al objeto o sujeto desde detrás apuntando hacia la cámara, por lo que la sombra del fondo desaparece. A cambio, lo que vemos del sujeto u objeto fotografiado puede aparecer más oscuro y con menos detalle que en el caso de la iluminación frontal. De hecho, en muchos casos y depende de cómo midamos la luz de la toma, este aparecerá en forma de silueta.
¿Qué Efectos Produce un Contraluz?
Dependiendo de cómo trabajemos la luz y configuremos nuestra cámara, con un contraluz podremos lograr:
- Un efecto más dramático.
- Agregar una atmósfera de ensueño a la fotografía.
- Añadir profundidad a la imagen, creando una mayor sensación de ubicación.
- Conseguir un mayor contraste.
- Separar al sujeto del fondo.
- Crear siluetas llamativas.
Cabe decir además que este tipo de iluminación puede lograrse tanto con luz artificial como con luz natural, y en exterior o en interior. Si estamos en un exterior lo más común será que empleemos el sol como fuente de luz principal, y que aprovechemos las horas del atardecer y el amanecer que es cuando el sol está más bajo.
Sin embargo, dentro de un interior cualquier ventana puede servirnos como fuente de luz principal para crear nuestro contraluz; y si no disponemos de luz natural siempre podemos optar por emplear luz artificial de lámparas, flashes o luz continua.
Consejos a la Hora de Fotografiar un Contraluz
El contraluz puede ayudarnos a lograr imágenes espectaculares, pero también presenta ciertos desafíos a la hora de exponer y componer nuestras capturas. Es por ello que a continuación vamos a repasar algunos consejos que nos vendrán bien cuando trabajemos con este tipo de luz.
- Sitúa a tu sujeto de espaldas a la fuente de luz, de manera que la fuente esté frente a ti, es lo esencial para lograr este tipo de iluminación. Dicha fuente de luz puede estar muy próxima o lejana al sujeto, y si es artificial podrás incluso hasta ajustar su potencia.
- Trabaja la composición. A la hora de componer una toma a contraluz podemos jugar con diversos factores. Uno de los más destacados es elegir si queremos que la fuente de luz esté totalmente oculta por el sujeto (es decir, que se quede tras él) o que esté parcialmente oculta. Imagina una nube y el sol oculto tras ella. La nube bloqueará la luz pero los rayos de sol que aparecerán tras ella te brindará una imagen preciosa.
- Ten en cuenta la altura de la fuente de luz. Sobre todo si estamos trabajando con luz natural la cual no podemos cambiar de altura, piensa que será durante las últimas horas de la mañana y de la tarde cuando el sol esté más bajo y podamos conseguir un efecto más dramático en nuestra toma.
- Dispara en formato RAW. Esto te lo hemos indicado en muchas ocasiones, y es que el formato RAW nos brinda todos los datos de la imagen y nos ayuda a conservar una mayor calidad durante el momento de la edición. Sobre todo en casos como la fotografía a contraluz donde tendremos que ajustar a veces fuertes contrastes de exposición, es sumamente útil.
- Usa el Modo Manual. La mejor forma de controlar la exposición en este tipo de situación lumínica y así evitar que nuestra imagen se sobreexponga o subexponga, es emplear el modo manual de la cámara. No le tengas miedo, piensa que gracias a él lograrás la imagen que te propones y no la que la cámara decide por ti. Además, ten en cuenta que si utilizas aperturas amplias de diafragma lograrás desenfoques suaves que le den a la toma un efecto de ensoñación, mientras que si cierras el diafragma podrás conseguir efectos tan curiosos como el famoso efecto estrella en tu fuente de luz principal.
- Utiliza la Medición Puntual. Con este modo de medición de la luz la cámara establecerá la exposición de acuerdo a un área mínima del encuadre que le indiquemos en lugar de teniendo en cuenta todo o gran parte de él. Esto nos permite precisar cuál es la zona que tiene que salir correctamente expuesta para que la cámara no decida por nosotros. Así pues, gracias a esta configuración podremos determinar si lo que queremos exponer adecuadamente es el sujeto frente a la fuente de luz, creando la atmósfera mágica a la que antes hacíamos referencia, o exponer bien el fondo y que nuestro sujeto salga en silueta.
- Experimenta con algunos accesorios. Aunque empleando el modo manual y la medición puntual la fotografía resultante ya saldrá como deseamos, siempre puedes utilizar accesorios fotográficos que te ayudarán a compensar un poco las diferencias de exposición que hay entre sujeto y fondo. Así pues, si vas a realizar un retrato a contraluz, puede que midas la luz en el rostro de tu modelo para que este salga correctamente expuesto, pero que entonces el fondo te aparezca demasiado sobreexpuesto. Una solución sencilla es emplear o bien un reflector 5 en 1 o una fuente de luz artificial como un flash o un panel led que actúen como luz de relleno, arrojando algo de luz sobre el modelo de forma que no haya tanto contraste lumínico entre este y el fondo, y así obtengamos una exposición más equilibrada.
Temáticas en las que Podemos Ver el Contraluz
A continuación vamos a repasar algunos de los casos en los que trabajar con una iluminación a contraluz puede ayudarnos a lograr imágenes espectaculares.
1. Contraluz en Retratos
Empecemos por ver cómo de efectivo puede llegar a ser un contraluz en fotografía de retrato, y para ello voy a presentarte dos imágenes hechas a la misma persona en el mismo lugar y momento, pero controlando precisamente la dirección de la luz para tratar de buscar la iluminación más favorecedora.
Primero voy a mostrarte la captura hecha con iluminación frontal y natural en exterior.
Se trata de un plano medio corto, en el que vemos a nuestra modelo situada de manera que el sol le incide frontalmente sobre el rostro. Al estar en un exterior y tener el fondo bastante lejos, la sombra no la vemos proyectada sobre él, pero fíjate en el rostro de nuestra protagonista. La luz del sol viene desde arriba, y eso provoca que en la cara de la modelo se proyecten sombras cenitales poco favorecedoras, como por ejemplo en los ojos que se quedan un poco apagados.
También es cierto que se trata de una luz bastante dura, lo cual enfatiza más las sombras. Si se hubiera empleado un difusor la luz sería mucho más uniforme y suave. No obstante, veamos ahora la misma foto hecha a contraluz, de forma que la modelo ha girado sobre sí misma para que el sol le incida desde detrás.
En este caso tampoco hemos empleado ningún accesorio, pero no nos ha hecho falta. Fíjate como el pelo de nuestra modelo parece cobrar vida e iluminarse con los rayos del sol, de forma que se remarca su contorno. Además, la medición se ha hecho sobre el rostro del sujeto, y esto por una parte provoca que las altas luces aparezcan un poco sobreexpuestas, pero a cambio logramos una luz uniforme y muy suave en el rostro de la modelo, que sería lo que se quedaría un poco oscuro si hubiéramos medido la luz sobre otra zona.
Veamos a continuación otros dos ejemplos. A la izquierda, tenemos el retrato hecho con una iluminación frontal con la luz de mediodía, lo cual provoca sombras cenitales tanto de la nariz, como de la barbilla e incluso las pestañas. Eso sí, la luz ilumina claramente todo el rostro y tenemos detalles en todas sus zonas.
En la toma toma de la derecha la modelo está situada a contraluz. Esto provoca que de nuevo el pelo adquiera mayor vida, y que dependiendo de la medición de luz que realicemos, la iluminación general de la escena sea aun más suave y sin sombras.
¿Pero qué ocurre si en vez de medir la luz sobre el rostro de nuestros modelos lo hacemos sobre la zona más iluminada de la captura para no sobreexponer la fotografía? Pues mira la fotografía que te muestro a continuación.
Si nos fijamos, la fuente de luz es la zona con más exposición de la toma. En este caso el autor de la fotografía decidió exponer sobre ese punto para que no se quemaran las altas luces, pero sobre todo porque así al situar a la modelo frente a esa fuente de luz podría sacarla en silueta. No tenemos información sobre ella, pero eso hace que sea más fácil identificarnos con esa figura o que podamos pedirle poses creativas que pueden llegar a interactuar con el fondo, como es el caso de la fotografía de portada, en la que el sujeto parece que juega con el sol como si de una pelota se tratara.
2. Contraluz en la Naturaleza
En la naturaleza y con el sol como fuente de luz principal también podemos encontrar un escenario ideal para capturar nuestras imágenes a contraluz. Como te decía antes, será durante la conocida como hora dorada tan amada por los fotógrafos, cuando más podamos aprovechar esos contraluces, ya que el sol estará situado en una posición más baja. Eso nos permitirá conseguir imágenes tan bellas como las del campo de amapolas.
No obstante recuerda que para lograr un contraluz no es necesario que la fuente de luz aparezca en el encuadre. Mientras ilumine el motivo principal desde detrás seguirá siendo un contraluz.
3. Contraluz en Fauna y Flora
También aplicar el contraluz en fotografía de flora y fauna puede ofrecernos imágenes impresionantes, como la que podemos ver a continuación.
Además, no te olvides de aprovechar aquellos elementos traslucidos, como por ejemplo una hoja, una flor o incluso el agua. La luz los atravesará creando un efecto fabuloso y realzándolos con una luminosidad algo surrealista. Si además compones la imagen colocándolos sobre un fondo oscuro estos resaltarán mucho más.
4. Siluetas
Como ya hemos comentado, una forma de utilizar el contraluz es exponiendo la toma sobre el fondo de manera que dejemos al sujeto o elemento protagonista de la fotografía en silueta, mostrando su forma o contorno. Aunque no podamos distinguir sus detalles, es una manera brillante de lograr una toma con fuerza.
5. Contraluz en Fotografía Nocturna
Aunque cueste creerlo, si por la noche realizamos exposiciones lo suficientemente largas lograremos obtener la luz que necesitamos para conseguir por ejemplo magníficas fotografías de la estrellas y la majestuosa Vía Láctea. Pues bien, siempre puedes componer colocando algún elemento delante de ese bello cielo nocturno para que aparezca en silueta y le de un toque especial a la fotografía, como por ejemplo ocurre en el siguiente ejemplo.
Y por otro lado, también durante la noche contamos con la luna. Esta puede convertirse en el perfecto fondo a contraluz para fotografiar siluetas de edificios, aviones e incluso personas.
6. Contraluz en Estudio o con Luz Artificial
Y por último, no te olvides de que puedes aprender a dominar este tipo de iluminación en un estudio o en tu propia casa, en la que emplees una ventana o alguna fuente de luz artificial como luz principal.
Esta es una buena manera de aprender a practicar con este tipo de luz, ya que en un interior tendrás más tiempo y control sobre la iluminación, que te ayudará a dominarla.
Además, dependiendo del tamaño de la fuente de luz, de su intensidad y de si el fondo es claro u oscuro, podremos lograr efectos distintos, como es el caso de los siguientes ejemplos.
En el caso de la toma de la izquierda la fuente de luz es más pequeña y potente (probablemente se trate de un flash externo), y el sujeto la tapa por completo. Esto provoca que solo se ilumine el contorno del protagonista. Si observamos ahora la fotografía de la derecha comprobamos que la fuente de luz es una ventana grande con una luz muy difusa, la cual no cubre por entero la protagonista. Eso hace que este segundo caso la toma no remarque el contorno sino la silueta entera de la protagonista sobre un fondo claro.
¿Le Llevamos la Contra a la Luz?
Ya has comprobado que no siempre tenemos por qué iluminar a nuestros sujetos u objetos protagonistas de manera frontal, y que situando la fuente de luz detrás de ellos podremos lograr resultados muy originales y bellos.
Por supuesto, necesitarás un poco de paciencia y práctica para aprender a fotografiar con éxito en estas condiciones, pero sin duda merecerá la pena. ¿Te animas a practicar con la fotografía a contraluz?