Aterrizamos directos sobre el final de la serie entorno al lenguaje visual: Círculos y rectángulos. En el capítulo anterior indagábamos en las propiedades expresivas de los triángulos, cómo se forman, que implicaciones compositivas poseen. En ésta ocasión nos acercaremos, por un lado, a la estabilidad y formalidad que ofrece la compensación entre líneas verticales y horizontales cuando aparecen juntas y, por el otro, a una potente herramienta contenedora muy ligada al crecimiento de diversas estructuras en la naturaleza. ¿Os animáis? ¡Seguid leyendo!
“Como fotógrafos, una de nuestras obligaciones será conocer el lenguaje visual, nuestro alfabeto gráfico, ciertas formas que aparecerán dentro del marco de nuestras imágenes guiando el recorrido del ojo. Los elementos más simples que disponemos para expresarnos serán los puntos, las líneas y las formas, todos relacionados entre sí pero con diferentes maneras de reconducir la mirada. En realidad, este grupo de elementos se interrelacionan de forma directa en orden ascendente, desde el más simple al más complejo, una consecución de puntos formará una línea y una asociación de líneas construirá formas, todo un lenguaje por descubrir.”
Formas: Un Grado de Complejidad Mayor
A lo largo de éstos seis capítulos hemos introducido un párrafo común a todos que resumen perfectamente la idea global planteada: los elementos simples del lenguaje visual se interrelacionan de forma ascendente, puntos y líneas se asocian para construir formas y éstas a su vez dependerán de las propiedades planteadas en los primeros.
Resulta difícil escapar del poder de atracción de un túnel, todo lo que queda contenido en él cobra protagonismo
Si en los triángulos contábamos en la mayoría de los casos con líneas diagonales, los rectángulos se componen de líneas verticales y horizontales y los círculos de líneas curvas. ¿Qué propiedades emergentes presentan? ¿Dónde podemos encontrarlos de forma natural? Tendremos siempre en cuenta un aspecto: resultan más interesantes cuando se insinúan. Un círculo puede estar formado por dos líneas curvas opuestas que no llegan a tocarse, sin embargo, nuestra mente tiende a cerrar la “forma” interpretando la escena como un perfecto círculo, continuidad. ¿Los vemos en profundidad? ¡Adelante!
Las gotas son un perfecto ejemplo de círculos naturales
Implicaciones Expresivas del Círculo
Tal y como adelantábamos en la introducción, los círculos son estructuras fácilmente identificables en la naturaleza: la cabeza de una flor forma un círculo, también las gotas de agua, las telas de araña, la copa de un árbol, la sección de un tronco o el propio arco iris que, a pesar de no mostrarse completo, lo interpretamos como tal.
A pesar de que el arco no es completo, la mente tiende a cerrarlo gracias al principio de continuidad
Recordemos las propiedades de las curvas, sólo de ésta forma podremos deducir las características de los círculos:
- Ofrecen un progresivo cambio de dirección
- Expresan ritmo y movimiento más allá que las rectas. También son suaves y fluidas
- Son atractivas por naturaleza, asociándose con la elegancia y delicadeza
- Constituyen una potente herramienta dirigiendo la mirada
- Pueden formarse mediante implicación de puntos o aprovechando la curvatura de estructuras artificiales y naturales
- Poseen sensación de cierre gracias a su natural asociación con círculos
El límite de la estructuras que protagonizan esta imagen crean una lectura circular muy marcada
Bien, ¿Qué podemos esperar de los círculos? Quizá su mayor expresividad se encuentre en su capacidad para “contener” objetos, todo lo que representemos en su interior captará nuestra atención. Ésta propiedad debe utilizarse con especial meditación pues todos los objetos que excluyamos del interior del círculo perderán importancia visual.
Los círculos poseen movimiento y centran la atención en su interior. En al imagen arriba expuesta, una araña junto a su tela, la estabilidad es máxima al centrar todo la atención sobre el propio centro de la imagen
El borde de la circunferencia también posee una característica propia: movimiento. Asociamos los círculos de forma natural con la rotación y suele crearse una guía a lo largo de su borde que dirigirá la mirada del espectador en toda su extensión. El resto de características implícitas a los círculos son las derivadas de las líneas curvas: ofrecen un progresivo cambio de dirección, son rítmicos, suaves, y dirigen muy bien la mirada.
Las cabezas de las flores forman círculos naturales
Cuando la perspectiva no es completamente frontal, los círculos pueden convertirse en elipses con propiedades prácticamente idénticas a los círculos
Implicaciones Expresivas del Rectángulo
Si en el caso de los círculos contábamos con numerosas representaciones en la naturaleza, los rectángulos aparecerán casi íntegramente en estructuras creadas por el hombre: ciudades, edificios, el interior de nuestros hogares, automóviles, aparatos electrónicos… casi vivimos en un mundo rectangular.
Considerablemente más estática que cualquier otra forma simple, los rectángulos también son útiles (dependiendo de nuestra intención) debido a su perfecta correspondencia con el propio encuadre de nuestras cámaras y la necesidad de alinearse completamente a las verticales y horizontales del propio marco. En ésta ocasión no podemos enumerar las propiedades de las verticales y horizontales para deducir las implicaciones de los rectángulos, pero si podemos subrayar que de la combinación de ambas (o más bien de su compensación) derivará la expresión marcada por los rectángulos.
Ordenación espacial del interior de una casa. La mayor parte de estructuras arquitectónicas creadas por el hombre se ajustan a la forma de los rectángulos
Los rectángulos serán, por tanto, estructuras de gran estabilidad, peso y solidez gracias a su relación con la fuerza de la gravedad. También son limitados, estáticos e inflexibles. Un último aspecto que deberíamos tener en cuenta: para representar rectángulos como tales deberemos de cuidar el ángulo de disparo, pues la más mínima variación oblicua puede convertirlo en trapezoide por efecto de deformación de la lente, un aspecto muy cuidado en fotografía de interiores.
De la mano de los rectángulos terminamos la serie que nos ocupa, esperamos que os haya resultado interesante pero, antes de despedirnos, ¿Qué tal un ejercicio?
¡Ponlo en Práctica!
En alguna ocasión he propuesto ejercicios para perezosos, no es el caso. Os invito a que salgáis a la calle y busquéis puntos, líneas (verticales, horizontales, diagonales o curvas) y formas (triangulares, rectangulares o circulares) y nos las mostréis.
- Sal a la calle en busca de puntos, líneas o formas
- Identifica qué tipo de estructura simple has retratado
- Qué implicaciones generales tiene y cómo has decidido utilizarla en tu propia imagen
- Muéstranosla