Si tienes una cámara réflex y quieres sacarle todo su potencial, llegará el momento en que tendrás que pasar de los modos automáticos y semiautomáticos, y profundizar en los abismos del modo manual.
Si eres de los que ya ha dado el paso, ¡enhorabuena!, ahora lo siguiente es disparar tu flash externo remotamente. Pero si por el contrario, has decidido vivir cómodamente con el flash montado sobre tu cámara, ¡no sabes lo que te estás perdiendo!, y por eso te voy ya dar 5 razones para que cambies de idea. ¿Quieres conocerlas?
1. Evitarás Reflejos Molestos
La luz tiene un comportamiento muy predecible, es pura física. Sabemos a ciencia cierta que un rayo de luz se refleja en una superficie pulida, como puede ser el metal o el cristal, con el mismo ángulo con en el que incide en ella. Por lo tanto, si disparamos de frente a dicha superficie con nuestro flash montado sobre la cámara, obtendremos un rebote de ese haz de luz que irá directo al sensor de tu cámara: el típico “flashazo”.
Sin embargo, disparando el flash de forma remota podemos realizar la misma fotografía variando el ángulo de iluminación, colocando la cámara de tal forma que no se vea el reflejo que se produce en el cristal, obteniendo un resultado totalmente diferente.
Pensarás que este problema lo puedes resolver también disparando el flash rebotado en el techo. En ocasiones, puede que te salve la toma, pero no siempre será posible. Si el techo es demasiado alto, no llegará luz en cantidad suficiente al objeto o, también, puede que no sea completamente blanco, con la consiguiente variación de temperatura de color que puede arruinar tu foto.
2. Obtendrás Volumen en tus Fotografías
Una de las limitaciones que tienes disparando tu flash en TTL es que, simplemente, haces que la máquina calcule la exposición correcta para que la foto salga bien iluminada. Pero si disparas el flash en manual, podrás conseguir aspectos como éste:
Si te fijas bien, aquí podría haber utilizado el flash de forma frontal y haber “rellenado sombras” pero la imagen habría quedado totalmente plana. La correcta combinación de luces y sombras hacen que la imagen cobre volumen.
Coloca a la modelo de forma lateral al sol para que éste le ilumine el cabello y parte del rostro, cierra el diafragma para limitar la luz ambiental a f/8, pon la velocidad de sincronización a 1/250 segundos, la máxima que te permita la cámara, el iso a 100 y la potencia del flash a 1/2 sin ningún difusor, porque estás equilibrando la luz del sol y vas a necesitar mucha potencia.
Por lo tanto, no puedes permitirte el lujo de difuminarla. Sitúalo a unos dos metros de la modelo, justo a tu izquierda.
Tienes control total de la situación, no serás esclavo de la luz existente: tú decides cuanta luz ambiente quieres y cómo y desde que ángulo, así como la intensidad a la que quieres iluminar a tu modelo.
¿Cuál es la exposición correcta?. La respuesta es sencilla: la que tú quieras que sea. Quieres hacerle llegar menos luz, baja la potencia del flash o aléjalo. Si quieres menos luz ambiental, cierra uno o dos pasos el diafragma y obtendrás un cielo menos brillante, pero, para compensar la pérdida de luz deberás acercar un poco más el flash a tu modelo o subirle potencia.
Parece complicado, ¿verdad?. Te aseguro que no lo es, simplemente es cuestión de práctica. Cuando domines esta técnica verás que nunca más estarás condicionado por la luz ambiental, serás capaz de domarla y utilizarla a tu antojo y podrás dotar a tus retratos de una sensación de tridimensionalidad, imposible de lograr con el flash sobre la cámara.
3. Esculpirás con la Luz
Tus retratos ya nunca serán los mismos. Saca el flash de tu cámara, experimenta distintos ángulos de “ataque” a tus modelos y descubrirás que puedes llegar a esculpir con la luz.
En esta ocasión tuve que usar un limitador de luz para evitar que ésta se dispersara y me iluminara a toda la modelo y el resto de la estancia. De esta forma, se ilumina sólo parte del cuerpo para conseguir este efecto tan particular. Además, si acercas el flash al sujeto y, a su vez, alejas al sujeto de la pared, obtendrás un fondo totalmente negro.
Te dejo un diagrama para facilitar la comprensión, la velocidad de sincronización es 1/250 seg.
4. Facilitarás el Crecimiento de tu Creatividad
En la medida que domines los ángulos en los que se refleja la luz sobre las distintas superficies aumentará tu faceta creativa.
En el primer punto hemos hablado de eliminar reflejos molestos. Disparando el flash remotamente podrás variar el ángulo en el que iluminas el objeto y aprovechar dichos reflejos para darle a tus fotos un toque creativo.
En la siguiente imagen, he adivinado fácilmente dónde se iba a producir el reflejo en el fondo, en base a los parámetros que te he comentado en el punto uno, y lo he utilizado para darle una especie de halo a la figura retratada. Por lo tanto, un reflejo que mal posicionado podría ser molesto, ha pasado a formar parte de la composición de la fotografía.
5. Tu bolsillo te lo Agradecerá
Si ya dispones de un flash con TTL, seguramente te habrá costado bastante caro y no te atrevas a sacarlo de tu cámara por miedo a golpearlo o que se te caiga. Puedes hacerte con un segundo flash, pero no te asustes, tu bolsillo no se resentirá ya que, para dispararlo remotamente tendrás que hacerlo en modo manual. No hace falta que tenga TTL, con lo que el coste del mismo se ve reducido considerablemente. Puedes conseguirlo por menos de 40€ y tendrás una fuente de luz con la que podrás hacer combinaciones con tu flash principal y así, conseguir efectos espectaculares.
Te recomiendo que leas una y otra vez el manual para sacarle todo su potencial. Mi elección fue YN 560II, un flash extremadamente fácil de usar, con pantalla led y con una potencia al alcance de los de alta gama.
¿Aún Necesitas más Razones?
No puedo negarlo, soy un enamorado de la iluminación y he tratado en este artículo de transmitirte esa pasión pero, si estas 5 razones te parecen pocas, siempre puedes echar un vistazo al blog de David Hobby, dedicado a la técnica Strobist. Cuando lo descubrí, quedé totalmente fascinado con esta técnica y el inmenso mundo de posibilidades que se abrían ante mí, y estoy seguro que a ti te pasará lo mismo. Ya te hablamos de cómo conseguir un esquipo Strobist por unos 80€, ¿recuerdas?
Y tú, ¿Has Disparado ya tu Flash de Forma Remota?
Si ya has disparado tu flash de forma remota, cuéntame si fueron algunas de estas razones las que te impulsaron a hacerlo y, si aún no lo has hecho, ¿crees que te he dado suficientes motivos para intentarlo?
¿Tienes fotos interesantes iluminadas con el flash fuera de cámara? Si te animas a dar el paso permanece atento al próximo artículo en el que te contaré todas las formas que tienes a tu alcance para modificar la luz de tu flash para ser más creativo.
Conclusión
Soy de los que piensa que todas las facetas de nuestra vida están interrelacionadas, y por lo tanto tu comportamiento cotidiano se verá reflejado en tu actitud como fotógrafo y viceversa. Las personas tendemos a acomodarnos y a refugiarnos en lo que se denomina "zona de confort" en la que desarrollamos nuestra actividad diaria. Todo aquello que sucede fuera de esa zona no existe o simplemente lo ignoramos porque está más allá de nuestras fronteras.
Conozco a fotógrafos cómodamente instalados en los modos P, Av y Tv (canon), y disparando su flash sobre su cámara sin saber que, si optan por el modo manual y sacan el flash de la zapata para dispararlo remotamente, podrán obtener fotos realmente sorprendentes. No quiero con esto decir que los modos automáticos y semiautomáticos sean malos, todo lo contrario, son muy útiles cuando no tienes tiempo para pensar y necesitas una foto rápidamente. Yo los uso constantemente, pero si dispones de tiempo para planificar una toma, lo que te propongo es que descubras un nuevo mundo de posibilidades con tu flash.
Si das ese paso tan importante en tu aventura como fotógrafo, verás que también puedes hacerlo con otras actividades en tu vida, que los límites no existen, eres tú el que te limitas, constantemente, con frases como: eso es muy difícil, no tengo tiempo, eso no es para mí... etc.
Créeme, al principio te costará adaptarte, porque son muchos parámetros los que tienes que controlar, pero con el tiempo y la constancia, dos de las principales recetas de éxito, lo conseguirás y tus fotos ganaran en creatividad y sobre todo, al tener el control total de lo que estás haciendo, ganarás en seguridad en ti mismo como fotógrafo y como persona.