Un problema bastante frecuente asociado a la fotografía digital es la aparición de ruido en nuestras fotos. Los motivos de su aparición son variados, y existen muchos programas para tratar de corregirlo dentro del flujo de trabajo del postprocesado. Pero la mejor manera de combatirlo es hacer lo posible para que no aparezca a la hora de hacer la foto. En este artículo te doy algunos consejos para tratar de mitigar la aparición de ruido en tus fotos. ¿Te animas?
1. Usa ISOs bajos
La primera regla básica en fotografía para conseguir fotos con menos ruido es utilizar los ISOs más bajos posibles.
La explicación reside en que nuestra cámara, a ISOs más altos que el mínimo, sustituyen parte de la información que debería recoger por estimaciones, de forma que no recogen toda la información de la escena, inventándose parte. Y la probabilidad de equivocarse es siempre mayor si nos inventamos esa información que si recogemos la información real.
Si deseas profundizar un poco más en este concepto, tienes una explicación más detallada sobre el funcionamiento del sensor y el valor del ISO en este artículo.
2. Evita que la foto quede subexpuesta
La primera regla (ISOs bajos) solo es válida si va acompañada de esta segunda: nuestra foto debe estar tomada con una exposición correcta.
Resulta que el sensor de nuestra cámara funciona mucho mejor cuando recoge información de las luces que de las sombras. O dicho de otro modo, la probabilidad de que aparezca ruido en las zonas más oscuras de tu fotografía es mayor que en las zonas claras.
Por ello, lo mejor es exponer de forma que recojamos la mayor cantidad de luz que podamos sin llegar a quemar ninguna zona, para corregir posteriormente la exposición si duera necesario, en lugar de subexponer la foto.
Subexponer una fotografía hará que aparezca más ruido del deseado incluso a ISOs bajos, por lo que es preferible usar ISOs más altos y exponer correctamente a utilizar ISOs más bajos y que nuestra foto quede subexpuesta.
3. Prueba la función de reducción de ruido en exposiciones prolongadas
Muchas cámaras cuentan ya con un modo de reducción de ruido para exposiciones prolongadas.
Lo que hace este modo es realizar dos fotos. Una en condiciones normales y otra con el diafragma cerrado. Esa segunda foto es, en teoría, una foto negra, pero en la práctica puede aparecer ruido en ella. La cámara utiliza este patrón para determinar la aparición de ruido y utilizarlo para corregir ese efecto en la foto.
Si tu cámara cuenta con esta función, no pierdes nada por probar que tal funciona. Y si los resultados son satisfactorios, ya tienes un método más de reducir el ruido en ese tipo de situaciones.
4. Evita el sobrecalentamiento del sensor
Está demostrado que parte del ruido que recoge el sensor es por el calentamiento de éste.
En sesiones largas en las que se realizan exposiciones prolongadas puede aparecer este fenómeno.
Lo cierto es que no tenemos muchas maneras de evitar el sobrecalentamiento de la cámara, pero en determinadas circunstancias, y sabiendo que hay una parte de ruido que puede venir por este motivo, podemos tratar de dejar reposar un rato la cámara manteniendola apagada para tratar de que baje la temperatura del interior y afecte menos.
5. Dispara en RAW
Disparando en RAW evitarás que la cámara tome sus propias decisiones a la hora de comprimir la fotografía y ahorrar espacio, manteniendo toda la información adicional.
En caso de que necesites realizar ajustes de reducción de ruido una vez hayas pasado las fotos al ordenador, siempre será mejor disponer de la información en bruto que tratar de corregir estos problemas con una fotografía ya procesada y con mucha menos información.
Así que, si el ruido puede resultar un problema en determinado tipo de fotos, lo mejor es que dispares en RAW si tu cámara lo permite.