Cuando llevas mucho tiempo haciendo fotos con una cámara, o si has tenido varios modelos de la misma marca, llega un momento en el que el control sobre sus funcionalidades es muy alto. Es una de las maneras de sacar el máximo rendimiento a tu cámara, pero para ello siempre recomiendo leerse bien el manual.
Cuando realizo determinados tipos de fotografías suelo configurar mi cámara de una manera concreta para facilitarme el trabajo y poder ser más rápido. ¿Quieres conocer mi método?
1. Trabajando con los Menús de Favoritos
Que las cámaras cada vez tienen más funcionalidades no es un secreto. Que los menús son cada vez más grandes y complicados tampoco. Como bien decía antes, es importante saber lo que puede hacer tu cámara, pero también es cierto que en cada foto no tocas todos los menús, de ahí que muchas cámaras tienen una especie de menú con tus funcionalidades favoritas o las que más sueles usar.
En mi caso tengo una serie de funciones en un menú, con lo que las tengo todas juntas y a mano. Esto me ahorra tiempo al no tener que ir sumergiéndome entre la cantidad de submenús que tiene mi cámara.
2. Conseguir un Histograma lo más Neutro Posible
Si no sabes lo que es el histograma te recomiendo que te leas primero este artículo. Si sueles ser de los que mira el histograma después de cada disparo tratando de derechearlo lo máximo posible, entonces te interesa saber que dependiendo de los parámetros que tenga tu cámara configurada verás un resultado diferente. Al final, el histograma que vemos no corresponde al archivo RAW, sino al de la interpretación en JPEG de dicha foto aplicando los parámetros internos de la cámara. Estos parámetros están relacionados con la nitidez, contraste, saturación o tono de color. Si disparamos en JPEG tenemos que seleccionar el que más nos guste, por ejemplo, el vívido, o paisaje, hay muchos.
Sin embargo, si lo que queremos es tener un histograma lo más neutro posible debemos de seleccionar unos parámetros neutros. Podéis hacer la prueba de disparar sobre un trípode la misma foto cambiando de estilo de imagen y veréis como cambia el histograma.
3. Previsualización en Blanco y Negro
Si te gusta disparar en blanco y negro, este consejo te va a gustar. La mayoría de las cámaras disponen de estilos de imagen para blanco y negro, aplicando una serie de parámetros a la imagen. Justo los parámetros de los que hablábamos en el consejo anterior. De hecho, la prueba anterior la podéis hacer configurando un modo en color y otro en blanco y negro para ver las diferencias en el histograma, como muestro en el ejemplo.
Cuando sé que la fotografía que voy a hacer la voy a revelar en blanco y negro configuro mi cámara en el modo monocromo. De esta manera puedo previsualizar el resultado en la cámara y ver si funciona o no. Obviamente, antes de disparar ya he previsualizado en mi mente la fotografía en blanco y negro.
Este consejo es muy útil para aquellas personas que están empezando o que les cuesta imaginar cómo sería esa fotografía en blanco y negro.
Si estamos disparando en JPEG, la fotografía será en blanco y negro. Pero si lo estamos haciendo en RAW, la fotografía sigue teniendo todos los colores, solo que en la cámara le aplica los parámetros de blanco y negro para que la podamos ver.
4. Y un Truco Más que te Puede Permitir Ahorrar Mucho Tiempo
En ocasiones quiero tener diferentes versiones de una misma fotografía por lo que me toca cambiar los parámetros cada vez. Este proceso puede hacerse muy pesado y repetitivo, haciéndome perder mucho tiempo. Pero para eso existen una serie de configuraciones en las que podemos programar nuestros parámetros según el tipo de fotografía.
Por ejemplo, si quiero tener la misma fotografía disparada a una velocidad normal, y otra con una larga exposición tengo que hacer cambios. Para ello, mi cámara tiene una serie de modos en la rueda de control. Otras cámaras simplemente tienen diferentes bancos de memoria donde almacenar nuestras preferencias. Basta con seleccionar el que queramos en cada momento.
De manera que, siguiendo con el ejemplo, para una larga exposición puedo configurar el modo Bulb, activar el levantamiento del espejo, o incluso establecer una temperatura de color determinada para contrarrestar la dominante del filtro que vaya a usar. Estos valores son genéricos. Sin embargo, en otras ocasiones he aprovechado estos modos para establecer unos parámetros de exposición, como por ejemplo el diafragma o el ISO. Si la luz no ha cambiado en esos minutos puedo ir haciendo fotos en los distintos modos. Un caso podría ser en una sesión nocturna. Si queremos obtener las estrellas como puntos podemos configurar un modo a ISO 6400, tiempo de exposición de 30" y f/4. Si además queremos hacer largas exposiciones configuraremos el modo Bulb con un ISO más bajo. De esta manera, con cada encuadre solo tendremos que seleccionar un modo u otro y disparar. Por supuesto, si utilizamos un intervalómetro lo programaremos para cada situación.