Si eres el único fotógrafo/a de la familia seguro que es a ti a quien le toca hacer las fotos familiares cuando os reunís todos. Sabes que es una responsabilidad, pero que también es el momento ideal para aplicar los conocimientos que has aprendido últimamente y sorprenderlos a todos.
Sin embargo, aunque parezcan sencillas, este tipo de fotos también entrañan algunas dificultades. Para hacer frente a la situación y tomar fotos de familia que no olvidarán, te vamos a dar algunos consejos útiles para que los pongas en práctica en tus próximas reuniones familiares.
#1. Crea un Ambiente Divertido y Natural
Cuando fotografías a tu familia, debes tener presente en todo momento que no son modelos profesionales. Se trata de personas que no tienen la práctica ni la paciencia necesarias para posar o aguantar una sesión fotográfica, especialmente los niños. Así que, hazte a la idea de que tendrás que ser muy paciente y comprensivo a la hora de hacer estos retratos.
Por otro lado, no todo el mundo es fotogénico. Por eso, si consigues crear un ambiente previo de diversión y emoción vas a lograr que todo el mundo se relaje, que las poses sean auténticas y las sonrisas parezcan más naturales. A lo mejor te toca contar algún chiste malo, pero tú conoces a tu familia y sabes lo que puede funcionar mejor.
#2. Prueba Ángulos Originales
No te limites a colocar el trípode y hacer la típica foto a la altura de los ojos en la que salen todos los sujetos de pie frente a la cámara. Experimenta con diferentes perspectivas y prueba con otros ángulos. Por ejemplo, haz que se tumben todos sobre el césped y que coloquen las cabezas unidas haciendo un círculo en el suelo. Ahora hazles reír y realiza una toma en picado (como la que vemos arriba)
También puedes aprovechar para hacer todo lo contrario. Túmbate tú en el suelo y dile a todos que hagan un círculo a tu alrededor juntando sus cabezas en el centro o uniendo sus manos. Realiza una toma en contrapicado mientras corren todos hacia un lado y consigue una fotografía divertida y diferente. Lo importante es que te atrevas a innovar.
#3. Usa la Lente Más Apropiada
Seguramente pienses que cualquier objetivo para retratos te puede servir a la hora de hacer fotografías familiares, pero todo dependerá del número de personas que salgan en la foto y de otros factores importantes. Si vas a hacer retratos de tres a cuatro personas puede que te sirve un 50 o un 35 mm, situándote un poco alejado de ellos.
Sin embargo, si estamos hablando de retratos donde aparecen de cinco a ocho personas o incluso más, necesitarás un objetivo angular o incluso gran angular. Será la única forma de que aparezcan todos dentro del encuadre sin estar demasiado apelotonados y sin tener que dejar la cámara demasiado alejada del grupo. Aunque si prefieres hacer fotos desde lejos para captar momentos más naturales sin que tu familia se dé cuenta, el teleobjetivo es la mejor opción.
#4. Busca una Buena Iluminación
Si vas a hacer las fotos en un interior, trata de situarte cerca de una ventana y evita el uso del flash directo. Siempre es mejor utilizar luz natural. Pero si no tienes más remedio porque no hay suficiente luz o los sujetos se encuentran a contraluz puedes usar un flash rebotado o suavizar su intensidad con un difusor softbox o similar.
También puedes utilizar una luz continua suave como la de un panel LED. Aunque lo más recomendable, como siempre, es que realices tus retratos familiares con luz natural en un exterior. Lo más importante es que todos los sujetos se sitúen a la sombra y que no estén unos al sol y otros a la sombra. No olvides que la luz del amanecer o del atardecer siempre será más bella que la de medio día.
#5. Adecua los Parámetros a Cada Situación
Tendrás que usar unos parámetros concretos según cómo vaya a ser tu captura. Si los sujetos están inmóviles y están situados a la misma altura unos de otros, podrás usar números f bajos (f/3.2 - f/5.6) para obtener fondos desenfocados. Sin embargo, si cada persona está situada a una distancia diferente de la cámara o te interesa que el fondo salga nítido, tendrás que usar números f altos (f/8-f/16) para obtener una mayor profundidad de campo.
Por otro lado, si la familia está en movimiento, tendrás que subir la velocidad de obturación (al menos 1/250s). Si en la foto salen niños pequeños o mascotas no podrás arriesgarte a que se muevan y salgan trepidados. Si además estás fotografiando una acción rápida no olvides usar el modo ráfaga y velocidades más altas (al menos 1/800s) para conseguir congelar el movimiento.
#6. Busca Inmortalizar las Emociones
Haz que la foto sea una parte más de un plan. De esta manera conseguirás que la familia se olvide de la foto y las tensiones asociadas a la misma. Lo importante es que captes emociones y momentos y no te centres tanto en que todos salgan perfectos. Si quieres conseguir ese punto de originalidad que tal vez no tuvieran tus fotos anteriores, puedes probar con los juegos.
¿Qué tal una pelea de almohadas o una piñata en medio del jardín? Puedes proponer una idea o un entretenimiento divertido como intentar saltar todos a la vez. Lo importante es que no parezca que has planeado al dedillo cada detalle ni cada sonrisa y que todo es natural.
#7. Deja que los Niños Sean Niños
Los niños más pequeños no paran quietos y va a ser muy difícil dirigirlos en las fotos. Ellos suelen estar a lo suyo, jugando o haciendo muecas. Así que lo mejor es concienciar a todos para que estén pendientes del pequeño/a de la casa y preparados, porque en el momento en que consigamos llamar su atención será el momento del disparo.
En general, tampoco es recomendable que todo el mundo esté intentando captar su interés, porque a veces son tantos los reclamos que el niño se siente desconcertado y no sabe dónde mirar. Si se agobia y se siente atacado es posible que incluso se ponga a llorar, así que trata de ser solo tú quien capte su mirada. Convierte la sesión en un juego si es necesario.
#8. Presta Atención al Atuendo y a los Colores
Cuando hagas tus fotos en familia intenta que todos vayan bien vestidos y arreglados. No hace falta que vayan con ropa de gala o que todos vistan del mismo color, pero al menos trata de que luzcan lo mejor posible. Si van con ropa demasiado casual o con el pelo desgarbado, seguramente no se gustarán en la foto cuando la vean.
Por lo tanto, elige ropa formal y neutra con colores que se combinen bien entre ellos. Si un miembro de la familia lleva ropa con colores demasiado chillones o estampados muy llamativos, acaparará toda la atención de la composición. Lo que queremos es que en la foto, todos los sujetos destaquen por igual como un todo.
#9. Crea una Composición Atractiva
Si estás fotografiando una acción te resultará complicado dominar la situación. Pero si tienes la posibilidad de dirigir a los sujetos, trata de balancear el peso visual del encuadre y colocarlos de forma atractiva. Siempre queda mejor que los altos estén detrás y los más bajos delante, de igual modo que es mejor que se coloquen de forma escalonada.
Para que te resulte más sencillo componer, puedes hacerte servir del mobiliario de la casa o del mobiliario urbano. Si los sitúas a todos en un escalón o en una escalinata será más fácil que todos salgan bien. No olvides cuidar el handiwork y evitar errores habituales como posturas antinaturales, cortar cabezas, manos o pies ni dejar personas a medias dentro del encuadre.
#10. Elige una Buena Localización y un Buen Fondo
La elección del lugar donde vayas a hacer las fotos también es importante. Una habitación oscura o un descampado abandonado puede que no sean el escenario más idílico para tu fotografía familiar. Trata de que ese lugar también sea parte de la familia, un jardín bonito o una habitación luminosa y ordenada pueden ser buenas opciones.
En general, deberás elegir colores neutros para el fondo. Es esencial que no llamen demasiado la atención o que no tengan motivos muy estridentes, porque pueden desviar mucho la atención y quitar protagonismo a los retratados. Aunque si el fondo no es lo que más te interesa, también puedes desenfocarlo. Usa una profundidad de campo baja y aleja a los sujetos del fondo y conseguirás que pase desapercibido.
#11. Rompe con el Esquema de la Típica Foto de Familia
La foto habitual en la que todos los miembros de la familia salen de pie frente a la cámara o sentados en el sofá la vamos a dejar a parte. Lo que queremos captar son fotografías memorables, que sorprendan a todo aquel que las vea. Si hace falta elegir meticulosamente el escenario o un atrezzo para la ocasión, merecerá la pena.
Para ello trataremos de captar la personalidad de la familia. Si sois una familia de viajeros ¿por qué hacer una foto observando un horizonte maravilloso? Si se trata de una familia muy dormilona, ¿por qué no hacer una fotografía en la cama? ¿y si solo hicieseis una foto de los pies, dejando al peque de la casa en medio?
#12. Usa Trípode y Disparador
Cuando haces fotos a una familia ajena no hace falta que tú salgas, pero si formas parte de ella, tendrás que ingeniártelas para poder caber dentro del encuadre. Para ello, lo más recomendable es que uses un trípode y dejes espacio dentro de la composición para ti.
Si usas un disparador remoto podrás hacer una y todas las fotos que quieras a distancia en el momento que tu desees. Si usas una profundidad de campo elevada (número f alto) habrá menor riesgo de que aparezcáis fuera de foco y si usas velocidades de obturación altas, tampoco apareceréis movidos, aunque podáis estar jugando o corriendo.