Ya hemos hablado largo y tendido en dzoom de la sensibilidad ISO y en todos los casos siempre te hemos recomendado controlar mucho este valor. Como sabes, lo conveniente es utilizar el mínimo valor posible de sensibilidad ISO, con el objeto de minimizar el ruido. Además de éste, aquí tienes otros 6 consejos para lograr los mejores resultados en el manejo de este parámetro.
No obstante, a pesar de este consejo general, existen algunas ocasiones en que es recomendable elevar la sensibilidad ISO a valores superiores a los que habitualmente podríamos definir como adecuados. En el artículo de hoy veremos 3 de estas situaciones y analizaremos por qué. ¿Quieres saber más?
Lo Primero Es Saber Qué Es La Sensibilidad ISO y Lo Que Te Permite
En este artículo vamos a dar por supuesto que conoces qué es la sensibilidad ISO y lo que puedes hacer incrementando o reduciendo el valor de este parámetro, ¿te parece?
Si no es el caso, échale un vistazo a este sencillo artículo en que se presenta este ajuste. O bien, si quieres descubrir la relación de la sensibilidad con respecto a apertura y tiempo de exposición, quizás te interese más este otro artículo sobre el triángulo de la exposición.
Una vez que ya sabemos qué es y para qué sirve la sensibilidad ISO es momento para que te presente las tres situaciones en que elevar la sensibilidad ISO de tu sensor se convierte en casi una obligación. Allá vamos.
#1 Cuando Usamos Focales Largas A Pulso
Como sabes, existe una regla, la de la inversa de la focal, que mide el tiempo de exposición máximo para garantizar un resultado no trepidado en tus fotografías. Esta ley dice que si disparas con un 50mm, te cerciores de utilizar tiempos de exposición superiores o iguales a 1/50 seg. Sistemas de estabilización aparte.
¿Qué ocurre cuando en lugar de un 50mm estamos utilizando, por ejemplo, un 300mm? Pues que como máximo puedas utilizar un tiempo de exposición de 1/300 seg. Si a esto le unes una apertura no demasiado amplia, hace que la iluminación no sea suficiente, por lo que no te queda más remedio que subir el nivel de sensibilidad ISO de tu sensor para asegurar una exposición adecuada. Es decir, cuando utilices objetivos de cierta focal, no seas tan estricto con tu nivel de sensibilidad ISO y ten algo de manga ancha para poder exponer correctamente.
No obstante, afortunadamente muchos teleobjetivos incluyen sistemas de estabilización que permiten utilizar tiempos de exposición algo superiores, aunque también, con la densidad de los últimos sensores, lo cierto es que la inversa de la focal se queda corta, con lo que a la mejora que nos ofrecen los sistemas de estabilización hay que contrarrestarle que la inversa de la focal actualmente se queda un poco corta.
#2 Cuando Queremos Congelar Altas Velocidades
Piensa en fotografía deportiva, fotografía salvaje, insectos, pájaros, etc. En definitiva, sujetos de lo más movido para los que necesitas tiempos de exposición lo suficientemente pequeños como para congelar el movimiento. La siguiente imagen habría sido imposible a ISO 100. Sus parámetros fueron 400mm, f/4.5, ISO 400 y 1/3200 seg.
Habitualmente, tendemos a abrir el diafragma al máximo para aprovechar la luz, pero esto no suele ser suficiente para utilizar tiempos de exposición reducidos y conseguir exponer adecuadamente. Por ese motivo, subir el nivel de sensibilidad nos permite reducir un poco la apertura para asegurar el foco y, por supuesto, utilizar un tiempo de exposición que permita congelar la imagen.
¿Qué me dices de imágenes de insectos batiendo sus alas, o de coches de carreras que deseas sacar completamente congelados? Puede ser adecuado utilizar tiempos de exposición cercanos a 1/2000 seg. o inferiores. Por lo que incrementar la sensibilidad deja de ser una opción para convertirse en una obligación.
#3 En Fotografía Nocturna. Especialmente Cielos
En situaciones de escasa iluminación, sin duda la sensibilidad puede ser ese tercer elemento del triángulo de la exposición que nos permita utilizar aperturas y tiempos de exposición más adecuados para el resultado que queremos obtener.
No obstante, con un trípode y si la escena lo permite, podemos no tener que recurrir a elevar la sensibilidad ISO a fuerza de utilizar tiempos de exposición prolongados. Pero, claro, la escena y el movimiento en la misma (o más bien la ausencia de éste) debe permitirlo.
En la fotografía de cielos con estrellas la sensibilidad ISO debe elevarse para evitar que la rotación de la Tierra origine que las estrellas aparezcan movidas en el cielo, salvo que éste sea el efecto que se busque, como en la técnica de star trails. Quien dice estrellas, dice cualquier otro elemento con iluminación propia, o bien iluminado y que pueda moverse (como en la fotografía de portada del artículo con el agua).
Si quieres que tus estrellas "no se muevan", en función de la focal y la apertura a la que dispares deberás utilizar valores de sensibilidad ISO no inferiores a ISO 800. Por lo que es otra situación en que el empleo de una sensibilidad ISO más elevada de lo normal debe ser asumido con total normalidad. La fotografía anterior, concretamente, exigió utilizar ISO 1600.
¿Se Te Ocurren Otras Situaciones En las Que Elevar La Sensibillidad ISO Está Más Que Justificado?
Además de las descritas, hay otras situaciones, como por ejemplo la fotografía de interiores, en que incrementar el valor de la sensibilidad ISO es una idea no sólo habitual, sino más que recomendable. ¿Nos presentas alguna más?, ¿o alguna recomendación sobre éstas u otras situaciones en las que es conveniente usar valores de sensibilidad ISO elevado?
Quizás prefieras compartir alguna imagen con un elevado ISO que sirva para reafirmar lo dicho en el artículo o para presentar otras situaciones en que puede resultar útil. O bien imágenes en las que no has necesitado tocar la sensibilidad por haber recurrido a "otro truco", ¿nos lo cuentas?, ¡nos encantará escucharte!