Las aves son unos animales fascinantes que podemos encontrar y fotografiar en la naturaleza. Existe una inmensa variedad de especies y además sus comportamientos, sus plumajes, sus movimientos en el aire son también muy diversos.
En otros artículos te hemos dado algunos consejos para fotografiar aves. Pero, sabiendo que muchas veces hace falta un empujón para lanzarse a hacer determinadas fotos, hoy os traemos este artículo de inspiración. ¡Que lo disfrutéis!
#1. Made in Taiwan
Los teleobjetivos (70mm o más) serán la lente favorita de los/las fotógrafos/as de aves, sobre todo si las aves a las que van a fotografiar son pequeñas. No es lo mismo fotografiar un águila que un estornino, la diferencia de tamaño es bastante notable. Además, poder estar haciendo fotos desde lejos nos dará ese plus de invisibilidad que necesitamos para no asustar a las aves.
#2. Geese Leaving
Muchos pájaros alzan el vuelo en bandadas creando maravillosas figuras geométricas. Como si de espectáculos visuales se tratase, nos regalan formas y movimientos muy fotogénicos que podemos inmortalizar con nuestra cámara. Aquí tendemos que tener especial cuidado con la profundidad de campo, usar aperturas reducidas (para que salgan varias aves enfocadas) será un reto si queremos usar velocidades altas.
#3. Wood Duck
Puedes que te estés preguntando ¿y ese maravilloso bokeh de dónde sale? ¿Cómo puedo yo conseguir una toma como esa? Con un teleobjetivo podemos lograr este efecto de desenfoque sin necesidad de utilizar una apertura máxima de f/1.8 o f/1.4. Recuerda que cuanto mayor sea la distancia focal, menor será la profundidad de campo de la toma.
#4. Burrowing Owl
Cuando fotografíes aves más grandes con un teleobjetivo no olvides realizar algunos primeros planos, sobre todo si se trata de aves bellas y místicas como esta. Los ojos de un búho son muy enigmáticos y suelen tener colores muy vivos y saturados así que pon toda tu atención en conseguir un buen enfoque de la mirada y algún gesto interesante.
#5. Egretta Tricolor
Captar a un animal cazando o realizando una actividad de su vida cotidiana es una de las tomas más interesantes que podrás conseguir. Vas a tener que disparar muchas fotos hasta conseguir la toma perfecta porque no puedes predecir sus movimientos del todo, pero disparar en modo ráfaga te puede ayudar a lograr captar el momento justo. Más tarde veremos cómo hacerlo con el caso práctico que te propondremos.
#6. Piping Plover
¿Te inspira ternura verdad? Este pequeño polluelo, solo frente a toda esa inmensidad llena de peligros... Casi sentimos lástima por él y salta dentro de nosotros el instinto de protegerlo... Esto lo consigue la composición que se ha elegido para realizar la toma. El minimalismo y el recurso del espacio negativo que percibimos visualmente nos evocan esas sensaciones al observar la fotografía: soledad, desprotección, aislamiento e incluso peligro inminente...
#7. Hungry Owl
El propio autor de la foto, Richard Lee, nos cuenta la historia que hay tras la foto. Después de días y días de nieve y frío, este búho hambriento sobrevuela la zona en busca de comida. Otros diez búhos hacen los mismo por sobrevivir al invierno. Esta no es una mirada afable ni un vuelo casual y el fotógrafo sabía que encontraría algo así cuando vino a esta zona. Sin duda es muy buen momento para salir a hacer fotos.
#8.Hummingbird
Fotografiar colibrís es para muchos uno de los mayores retos de un/a fotógrafo/a de aves. Se trata de animales pequeños que miden entre 9 y 15 cm y cuyas alas baten entre 55 y 75 veces por segundo, según el movimiento que estén realizando. ¿Te imaginas lo difícil que es congelar la acción, que el colibrí salga nítido y que la exposición sea correcta? Fíjate en los datos EXIF de esta foto, se ha precisado de una velocidad de 1/8000s y una ISO 5000 porque la apertura también tenía que ser reducida.
#9. Across the Surface
¿Te crees capaz de cazar a un ave justo en el momento que alza el vuelo? Un consejo, trata de hacer tomas relativamente amplias y tratando de seguir la ley de la mirada o de la dirección, como en este caso. Consiste en dejar espacio o aire en la zona del encuadre hacia donde mira o se dirige el sujeto. De este modo el espectador interpretará que este se mueve en esa dirección y se sentirá cómodo observando la acción.
#10. European Robin
¿Cómo se puede fotografiar un petirrojo desde tan cerca con un 90 mm? El autor de la foto, Benoit Gauzere, nos cuenta la historia detrás de la foto. Resulta que este pequeño petirrojo chocó contra su ventana y al verlo aturdido lo metió una caja con una tela para que se recuperase. A los 30 minutos el petirrojo salió de la caja y se posó sobre una silla durante 10 o 15 minutos, momento que aprovechó el fotógrafo para hacer esa improvisada sesión. El petirrojo dejó que él se aproximara hasta el punto de tomar fotos como esta. Tras la sesión se marchó. Curioso ¿verdad?
#11. Limosa Fedoa
Existen muchas especies de aves acuáticas (patos, garzas, fochas) que encontrarás a menudo en los humedales, lagos, pantanos o salinas. Lo bueno de estos entornos es que el agua suele estar estancada y eso significa que podremos capturar reflejos casi perfectos. Aprovecha para hacer fotos en las que el protagonista sea el reflejo del propio ave para lograr tomas cargadas de simetría y originalidad.
#12. Three by three
Muchas veces encontrarás grupos de pájaros apostados en una zona. Puede ser un buen momento para practicar con las normas de composición y jugar con la profundidad de campo. En esta ocasión la regla de los impares ha sido la protagonista. Como si de un podio de entrega de premios se tratase estos tres gorriones forman un triángulo en el centro del encuadre. Por otra parte, los tres postes verticales equilibran la composición.
#13. Hi Hedwig
No siempre necesitamos que el ave sea la protagonista con un fondo muy desenfocado, pueden haber más elementos interesantes integrados dentro de la toma. Fíjate en esta lechuza, en lugar de estar sobre la rama de un árbol está parada en mitad de un campo de flores, probablemente acechando a su presa. Esas flores en primer término aportar mucho valor a la fotografía, así como un aporte de color que potencia el interés.
#14. Keel-billed Toucan
Una buena elección a la hora de fotografiar aves es la de optar por las especies más exóticas. Llamarán la atención solo por sus colores saturados y su rareza. Pero siempre debes intentar ir un paso más allá. Fíjate en la foto del tucán. Los tucanes viven en entornos tropicales, por lo que solemos asociar a esta especie con el verano y el calor, pero aquí está lloviendo. Ese contraste que no esperamos ver es lo que aporta valor a la toma y son detalles que tú también debes buscar si quieres hacer fotos únicas.
#15. Coconut Nest
No te limites solo a fotografiar aves sin más y recuerda el poder de la narrativa, el poder de contar historias con nuestras imágenes. Estos periquitos viven en unos nidos creados por el hombre con cáscaras de coco vaciadas. Solo con eso ya estamos contando una historia. El periquito parece que nos saluda desde dentro de su casa de diseño, mientas vemos que hay otros nidos alrededor, probablemente habitados por otros pájaros, por lo que se representa la idea de comunidad y de familia.
#16. Snowy Egret
No te olvides de aplicar más técnicas a tus fotografías de aves. De igual modo que una bella silueta puede ser la protagonista de un retrato a contraluz, el dibujo de la silueta de un ave puede muy bello. Naturaleza en estado puro y contraste de color, no se puede decir más de una foto como esta.
Fotografía de Aves: Un Caso Práctico
#1. Material Necesario
Para realizar una toma de este tipo necesitarás algunos materiales y parámetros concretos. Si tu intención es fotografiar aves o pájaros te vendrá muy bien un teleobjetivo o una lente zoom. Cuanto más luminosa sea la lente mejor, porque tendremos que usar velocidades de obturación muy altas y si andamos escasos de luz tendremos que compensar para obtener una buena exposición.
Si necesitas un punto de apoyo pero el trípode es demasiado pesado o aparatoso puedes optar por un monopié. Con este accesorio, ideal para fotografía de fauna y flora, conseguirás un plus de estabilidad pero podrás moverte libremente y reencuadrar de forma rápida si el sujeto fotografiado se desplaza o se mueve.
Trata de vestir con colores oscuros o estampados tipo camuflaje que te ayuden a mimetizarte con el entorno para pasar más desapercibido y no asustar a las aves. Piensa que si llevas puesta ropa muy llamativa los espantarás fácilmente y te verán incluso desde lejos.
#2. Parámetros Recomendados
Para disparar una foto como esta, en la que el pato doméstico se encuentra en movimiento, necesitaremos una velocidad alta para congelar el movimiento. Podemos usar el modo manual o bien el modo semiautomático con prioridad a la velocidad de obturación (S en Nikon y Tv en Canon). Así la cámara elegirá una apertura y sensibilidad ISO adecuadas.
En un momento como este, en el que vamos con prisa porque no queremos perder una buena foto, no es una locura recurrir a los automatismos. Mejor eso que el ave se marche y perder la foto ¿no crees? Si elegimos una velocidad de obturación superior a 1/2000s lo más probable es que consigamos congelar la acción.
Haz la foto y comprueba si sale trepidada, si no tienes tiempo para pararte sube la velocidad y repite la toma las veces que creas conveniente. Luego comprueba qué velocidad es la más adecuada para el movimiento de esa ave en concreto y guárdala para futuras tomas. Piensa que un pato no se moverá igual de rápido que un colibrí y esa velocidad también cambiará según la acción que estén realizando en ese momento.
#3. Enfoque Automático y Disparo en Ráfaga
No te olvides de enfocar a los ojos del animal, como ocurre con los retratos, el ojo humano busca la nitidez en la mirada así que no dudes en darle prioridad. Para garantizar el enfoque lo mejor es que optes por un enfoque puntual servo continuo (AF-C en Nikon/Sony/ AF AI Servo en Canon).
Si el enfoque puntual resulta complicado, opta por un área dinámica pero un número de puntos reducido. Si cuentas con una cámara sin espejo, como es mi caso, el focus peaking marcará la zona enfocada con un color resaltado y todavía será más sencillo enfocar a tu gusto.
Por último, si tu cámara lo permite, dispara con el modo ráfaga activado. Cuantas más fotos hagas por segundo más posibilidades de captar la foto que tú buscas. Si optas por una toma única o ráfagas simples es posible que pierdas la foto en la que caza a su presa o extiende las alas. Cuanto mayor sea la probabilidad de capturar el momento, mejor.
#4. Revelar y Editar
Una vez pases las fotos al ordenador, importa tus fotos en tu programa de revelado favorito. En este caso, he revelado la toma con Capture One Pro 20. Primero aplicaremos unos ajustes iniciales o previos que tienen que ver con la selección del perfil de la cámara, de la lente, la corrección de distorsión, aberraciones, eliminación de halo, reencuadre, recorte y rotación de la toma.
Después le tocará el turno a los ajustes más básicos de exposición y de color. Usaremos herramientas como exposición para ajustar el contraste, el brillo y la saturación y la herramienta de alto rango dinámico para ajustar las altas luces y las sombras. También ajustaremos el balance de blancos y los niveles.
Finalmente realizaremos los ajustes locales. Para ello iremos creando capas donde aplicaremos ajustes por máscaras. Añadiremos algo de enfoque y exposición a la zona de los ojos y el pico, donde se produce la acción. Potenciaremos algunos colores con la herramienta de Editor de Color y, por último, agregaremos algo de viñeteo para oscurecer los bordes.