Hola a todos. Recientemente he adquirido una cámara de segunda mano y basándome en mi experiencia he creído útil redactar un artículo donde hablar de todos los detalles que se deben tener en cuenta para asegurar una buena compra.
Actualmente todo mi equipo es de segunda mano: cámara y cuatro objetivos, y estoy más que contento con él. Todo en perfectas condiciones y en conjunto habré ahorrado unos 1000€. Dinero que de otra manera no podría haber aprovechado para otras cosas. Es para pensárselo, ¿verdad?
Antes de empezar, doy por hecho que ya tienes claro qué cámara quieres comprar. Se trata de una elección muy personal que depende de muchas cosas que no vamos a tratar aquí. Esta guía está pensada para ayudarte en el momento justo de la compra y evitar que te la cuelen.
Comprender el Contexto: Comprar Cámara de Segunda Mano
Vivimos sumergidos en una vorágine de consumismo donde el mercado nos bombardea con cientos de productos distintos de distintas marcas, que son mejorados continuamente. Muchos compramos cosas sin necesidad a las que luego no les sacamos todo el provecho.
Por otro lado, con la revolución de las comunicaciones no son pocas las páginas y aplicaciones dedicadas a la venta de segunda mano a las que tenemos acceso inmediato.
El resultado es un amplio mercado de segunda mano con productos prácticamente nuevos y además en un sector con muy buena reventa como es la fotografía, con productos que suelen estar bien cuidados ya que no se trata de algo que se compre cualquier simple aficionado.
Factor de riesgo en las Compras de Segunda Mano
Toda compra de segunda mano conlleva un riesgo y hay que tratar de reducir ese riesgo al mínimo posible. Lo más importante y siempre que puedas, intenta comprar en persona para poder inspeccionar la cámara in situ.
Pregunta por el número de disparos. Eso te dará una idea de la vida útil que le queda a la cámara y te servirá para fijar el precio. En internet tienes amplia información sobre el límite teórico de cada modelo así como software libre que mide tal número de disparos.
Si están disponibles, fíjate en las opiniones del vendedor/a por parte de otros compradores.
Y por último, la garantía. No suele ser frecuente, pero un producto en garantía con su correspondiente ticket de compra siempre nos dará más seguridad.
Por norma general, cuanto más segura sea una compra más dinero nos tocará soltar.
Vigilando el Aspecto: Clave en Segunda Mano
Toda cámara usada es normal que tenga desgaste estético que no influye en su funcionamiento, pero que es clara señal del cuidado que ha recibido el equipo. Excesivo polvo, grandes rasguños o golpes, restos de grasa e incluso óxido son signos de que el equipo no ha sido guardado y cuidado debidamente.
Abre las tapas de la tarjeta y la batería para comprobar que no están rotas y están libres de óxido por dentro. Mira también que no estén rotos los puertos de disparador, USB, etc. Examina que no esté muy rayada la pantalla LCD trasera y el panel LCD superior.
Igualmente y aunque no es importante, que el vendedor/a conserve el manual de instrucciones, los CDs de software o la caja original, son indicativos de que estamos ante alguien que mima sus cosas.
Revisando el Funcionamiento
Ahora viene la parte importante. El determinar si la cámara es funcional y está en buenas condiciones para cumplir su propósito: hacer fotos. Y para determinarlo, te conviene comprobar los siguientes puntos:
Interior de una Cámara de Segunda Mano
Lo primero a tener en cuenta sería comprobar el corazón de la cámara. Abre la tapa de la montura y mira el estado del espejo. Examina el sensor haciendo alguna foto de larga exposición o activando la opción de limpieza para poder verlo detenidamente, incluso alumbrándolo con una linterna; por ejemplo, la de tu móvil.
Posteriormente, engánchale un objetivo y comprueba la visión a través del visor. El que esté algo rayado por la parte externa o tenga motas de polvo en su interior no influye en las fotos siempre y cuando no resulte una experiencia excesivamente molesta. Apunta hacia un punto de luz y mueve la cámara de un lado a otro para ver al contraluz si la pantalla de enfoque tiene manchas y arañazos. Acuérdate de graduar el visor si lo ves todo borroso.
En el tercer paso, haz fotos para determinar la suciedad del sensor. Cierra el diafragma al máximo, enfoca manualmente al infinito y haz varias fotos al cielo o a una pared blanca. Examina la existencia de manchas en las fotos y si son muchas o muy exageradas. Aunque no afecta al funcionamiento de la cámara y la limpieza del sensor es algo que deberás hacer tarde o temprano, cuenta con ese coste extra que te supondrá adquirir una cámara con un sensor sucio.
Enfoque Automático
Activa el enfoque automático. Enfoca a distintas distancias para ver cómo responde la cámara. Prueba posteriormente con el punto de enfoque central, y con varios externos, confirmando que la cámara reconoce los puntos de enfoque.
Fotos de Muestra: Siempre Aportan Información
Ya que estás mirando por el visor, haz varias fotos de muestra a objetos cercanos y lejanos, a luces de distinto color y con distintos valores de velocidad de obturación e ISO.
Haz alguna foto a máxima velocidad de obturación y presta atención al sonido del obturador. Dispara también a ISO máxima y comprueba en las fotos que la cámara no hace cosas raras con el ruido a ISOs elevadas y gestiona bien el balance de blancos.
Botones, Conviene Revisarlos en Compras de Segunda Mano
Es el momento de apretar botones indiscriminadamente. Entra en la galería, borra alguna foto, mueve los diales, aprieta el botón de previsualización de PDC, etc. Echa un vistazo al panel LCD y modifica los modos de disparo, el balance de blancos, ISO... Pulsa todos los botones y comprueba que no haya ninguno muerto.
Estabilizador de imagen
Si la cámara o el objetivo tienen estabilizador, mira por el visor y deja el disparador apretado hasta la mitad. Verifica que la cámara reduce el tambaleo. Esta opción es más fácil de ver en el siguiente paso, la visión en directo.
Video y Live view
Si la cámara tiene opción de visión en directo o video, úsalas también. Graba un pequeño video enfocando a varias zonas. Reprodúcelo y comprueba también que se escuche el sonido en el caso que la cámara tenga micrófono y altavoz para la reproducción de videos.
Flash
Dispara alguna foto con flash para ver si funciona. Si puedes disponer de un flash externo para verificar que funcione la zapata, perfecto. En caso contrario, la zapata no es habitual que dé problemas.
Puertos y otras aplicaciones
Al igual que el anterior, es un aspecto más difícil de comprobar por no tener a mano lo necesario. Prueba al menos que la cámara reconozca el disparador, lo más esencial. Puerto USB, HDMI, salida de auriculares, etc. Si puedes verifícalos también. Ten en cuenta también si la cámara tiene conexión WiFi o GPS o alguna otra función especial.
Cargador
Las cámaras se venden originalmente con cable USB y cargador. Lo normal es que en la compra también te los incluyan. Enchufa el cargador con una batería y mira que la luz se encienda.
Recomendación final
Si durante la compra, has comprobado todo y no estás conforme, NO COMPRES. Te estás jugando mucho dinero y en el mercado de segunda mano no hay marcha atrás.
Si no lo tienes claro, di simplemente que te lo tienes que pensar. Que no te dé apuro dar largas. Negocios son negocios. Piensa que tú tampoco vas a recibir un trato preferencial. Es mejor ser paciente y esperar a comprar algo con lo que te encuentres realmente satisfecho/a.
Y para finalizar, os dejo una check list para ahorraros el trabajo de tener que anotarlo vosotros.
Y esto es todo. Seguramente me haya dejado algún aspecto importante por comentar, pero si llegaste aquí buscando ayuda para comprar una cámara de segunda mano, echa un vistazo a los comentarios de los lectores que seguro tienen algo interesante que añadir. :P
¡¡Un saludo a todos!!