El hecho de sujetar la cámara correctamente sin duda influye para que tus fotos no salgan ‘movidas’, por eso en este artículo te voy a explicar 'paso a paso' y 'postura a postura' cómo debes coger tu cámara y ganar la mayor estabilidad posible. ¡Descubre cómo despedirte definitivamente de las fotos movidas!
¿De Verdad es tan Importante Sujetar Bien la Cámara?
Seguramente te ha pasado alguna vez, sobre todo si eres principiante… Haces una foto pensando que te había salido perfectamente nítida (o así lo parecía en la pantalla de la cámara) y al pasarla al ordenador te has dado cuenta de que en realidad estaba movida.
Esto es muy habitual que ocurra e influyen muchos aspectos. Si no utilizas un trípode puede que la causa sea algún tipo vibración de tu cuerpo en el momento de realizar de fotografía. También debes tener en cuenta que cuanto menor sea la velocidad de obturación que utilices al realizar una captura, más sensible será la imagen a las vibraciones. Por eso, en condiciones de luz baja es más normal que las fotos te salgan movidas.
Al margen de los diversos aspectos que pueden influir para que una foto carezca de la nitidez necesaria, está claro que la estabilidad en el momento de la captura es un punto esencial. Por este motivo, es relevante aprender a coger la cámara de la forma más estable posible.
Con esto quiero decir, que las posturas que te voy a recomendar no es que sean oficialmente las más correctas, sino las que considero que pueden ayudarte a conseguir mayor firmeza a la hora de realizar tus fotos. Luego serás tú el que decidirá en qué postura se encuentra más cómodo y más estable cuando entres en materia.
Consejos para una Buena Postura y una Sujeción Correcta de tu Cámara
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Vamos a enumerar los consejos básicos para adoptar una buena postura al sujetar la cámara:
#1. Sujeta la Cámara con las Dos Manos
Aunque parece un punto obvio, más de una vez seguro que habéis visto a alguien haciendo una fotografía sujetando la cámara con una sola mano.
Da igual si haces una foto con una réflex o con un Smartphone, usar las dos manos siempre te va a dar mayor estabilidad, sujeción y firmeza.
#2. Mira a través el Visor y ‘Utiliza la Cabeza’
Intenta evitar realizar tus fotos mirando la pantalla LCD de tu cámara en modo Live View. Si realizas tus fotografías encuadrando a través del visor, tendrás mayor estabilidad.
Si además utilizas de punto de apoyo tu rostro (frente, pómulo, mejilla) conseguirás ese tercer punto de apoyo que necesitas (junto con tus dos brazos) para ganar mayor estabilidad, como si tu propio cuerpo fuera el trípode que necesitas.
#3. Junta los Codos al Cuerpo
Es muy importante que pegues todo lo posible tus codos al cuerpo para que sirvan de mayor soporte a tus brazos.
Puede que al principio te resulte un poco extraña esta postura, pero poco a poco te acostumbrarás y comprobarás que, efectivamente, tu estabilidad mejora notablemente.
#4. Usa tu Espalda como Centro de Gravedad
De igual modo que es importante la posición de tus manos, brazos o rostro, la espalda y las piernas también lo son. Todos ellos forman parte de tu centro de gravedad.
En última instancia, todo se reduce a que ‘cuanto mayor sea tu centro de gravedad y mejor se distribuya el peso de tu cuerpo, menor será la probabilidad de que te muevas’ y ‘cuanto más cerca esté la cámara del núcleo de tu cuerpo, más fácil será que te mantengas quieto’.
Hago hincapié en este punto porque la posición de la espalda suele ser un error muy frecuente. Inclinarse hacia delante o hacia atrás a la hora de hacer fotos es muy habitual entre fotógrafos, tanto principiantes como no tan principiantes. ¡Con lo sencillo que es dar un paso hacia adelante o hacia atrás!
Tener la espalda completamente recta y alineada siempre te va a dar mejores resultados para mantener el equilibrio y evitar las vibraciones que pueden provocar que tus fotos salgan movidas.
#5. Coloca Bien las Piernas y los Pies
La colocación de los pies es muy importante como base de la estabilidad de todo tu cuerpo. Evita por todos los medios mover los pies o balancearte mientras realizas una captura.
Es mejor que los mantengas ligeramente separados y alineados más o menos a la altura de tus hombros. Recuerda que tus piernas deben estar extendidas o ligeramente flexionadas sin llegar a estar en tensión.
También puedes adelantar ligeramente hacia el frente uno de tus dos pies (normalmente el izquierdo) para estabilizarte, aunque lo importante es que busques la postura con la que te sientas más cómodo y equilibrado.
#6. Otros Consejos que Debes Tener en Cuenta
Hay otros aspectos importantes que no debes pasar por alto a la hora de conseguir una mayor estabilidad, como mantener una pequeña tensión muscular. La flacidez de tu cuerpo o a la languidez de tus músculos podrían causar vibraciones.
Eso sí, controla la fuerza que ejerces sobre la cámara teniendo también en consideración su peso. Si aprietas demasiado fuerte la cámara o incluso si ejerces demasiada presión en el disparador, puedes provocar un ligero temblor, que es precisamente lo que queremos evitar.
Controlar la respiración también es una tarea que debes tener muy en cuenta, ya que al respirar también generas movimiento. Por eso es mejor que aguantes la respiración justo en el momento del disparo fotográfico.
Inspira cuando tengas la cámara preparada, mantén el aire unos segundos mientras presionas el disparador y expira tras realizar la fotografía. Otra técnica consiste en inspirar y expirar el aire y antes de volver a inspirar realizar el disparo. Lo importante es que el momento en el que realices la toma estés completamente quieto.
Postura Horizontal Básica
Después de haber visto los consejos básicos para una correcta postura y una buena sujeción de la cámara, vamos a ver cómo aplicarlos a las posiciones más habituales.
La postura horizontal es la más básica y la más sencilla a la hora de tomar una fotografía. Con la palma de la mano izquierda debes sostener la mayor parte del peso de la cámara y con los dedos sujetar suavemente el objetivo de la cámara, de forma que puedas acceder fácilmente a los anillos de zoom o enfoque.
En el caso de utilizar teleobjetivos con una lente muy grande deberás dedicar tu mano izquierda a soportar únicamente el peso del objetivo para equilibrar el peso de la cámara.
Como ya te estás imaginando, la diestra es la encargada de cambiar los parámetros y ajustes. Con la mano derecha debes, por tanto, abrazar el lateral derecho de la cámara, de modo que el dedo índice caiga de modo natural sobre el disparador, y que el pulgar abrace la parte posterior de la cámara, cerca de los controles principales.
Postura Vertical Básica
La postura vertical básica, que es la más utilizada para fotografía de retrato, es un poco más complicada que la anterior, pero las premisas en realidad son las mismas. Solo cambia el hecho de que perdemos el brazo derecho como punto de apoyo al no estar pegado al cuerpo.
Para conseguir la mejor estabilidad en esta posición, te aconsejo que sea el codo izquierdo el que se encargue de sostener el peso de la cámara. Es decir, junta todo lo que puedas el codo a tu cuerpo acercándolo ligeramente al centro de tu pecho para conseguir mayor firmeza.
Si consigues hacerte con un grip, que permitirá un mayor agarre de tu cámara, te resultará más fácil realizar este tipo de fotografías y te sentirás más cómodo en la sujeción.
Más Posturas Corporales según la Perspectiva
#1. Con la Cámara en el Hombro
Hay muchas variantes de esta postura, pero básicamente consiste en colocar la mano izquierda en el brazo u hombro derecho y utilizar el hombro izquierdo para soportar el peso de la cámara, la cual sujetaremos únicamente con la diestra.
Esta postura te permitirá moverte horizontalmente de forma suave con un mínimo movimiento vertical. La única desventaja es que no podrás ajustar los anillos del objetivo con la mano izquierda. Esta posición te puede venir muy bien si vas a utilizar un teleobjetivo con una lente voluminosa para equilibrar mejor el peso.
#2. Sentado sobre una Superficie
Sabemos perfectamente que al sentarnos nuestro centro de gravedad baja y que aumenta nuestro equilibrio, pero aun así hay formas de colocarnos más estables que otras.
Si estiras las piernas solo estás soportando una parte de tu peso total y es muy posible que algún balanceo arruine tu foto. Simplemente recogiendo un poco las piernas podrás apoyar los codos en tus muslos creando una base más sólida donde descansar el peso de la cámara.
También puedes sentarte con las dos piernas cruzadas y la espalda recta apoyado los codos en los muslos.
#3. Apoyado sobre tu Rodilla
Si el ángulo de la toma que necesitas requiere que te arrodilles, hazlo, pero flexiona una o las dos rodillas por completo, no te quedes en tensión en posiciones intermedias.
Si ejerces una gran tensión en los músculos de tus piernas lo único que conseguirás son más vibraciones o incluso lesiones o tirones.
#4. Tumbado en el Suelo
Si estás tumbado en el suelo lo más importante es la parte superior de tu cuerpo, que es donde estará la mayor parte del peso, por lo que la posición de tus piernas no será lo más relevante. En este caso es importante que apoyes los brazos en el suelo, ellos son los que a modo de trípode junto con tu rostro serán el soporte principal.
Es importante que mantengas los brazos relativamente juntos debajo de tu pecho y no suspendidos en el aire o muy separados.
Alternativas para Ganar Estabilidad
#1. Busca un Punto de Apoyo
El simple hecho de buscar un apoyo adicional cercano a ti es una buena oportunidad para estabilizarte aún más. Apoyar la cámara, los brazos o el cuerpo sobre un objeto sólido como un muro, una pared, un poste o un árbol te aportará un plus de estabilidad que no debes desaprovechar.
Por eso, fíjate muy bien en tu entorno y todo aquello que puedas utilizar para ayudarte a ganar firmeza y conseguir la mejor captura, sobre todo si las condiciones de luz son bajas o se trata de fotografía nocturna.
#2. Utiliza Accesorios o Gadgets
Si quieres ser todavía más meticuloso con la eliminación del movimiento en tus capturas, el trípode es la mejor opción para conseguirlo. A veces es un fastidio tener que cargarlo, pero te dará la máxima estabilidad.
Si el problema es que realizas fotografías por de la noche o con poca cantidad de luz, además del trípode también puedes contar con un flash. Otras alternativas que debes tener en cuenta son el uso de lentes estabilizadoras o incluso del grip, entre otras, que te ayudarán a mejorar la firmeza y la sujeción de tu cámara.
¡Adiós a las Fotos Movidas, También en tu Smartphone!
Hoy en día los smartphones de última generación tienen cámaras incorporadas de muy buena calidad y podemos realizar capturas realmente buenas con ellos. Aunque también puede que nos salgan fotografías movidas o con una nitidez que no es la que esperamos.
Para poder conseguir que nuestras fotografías no salgan borrosas debemos aplicar prácticamente los mismos consejos que hemos enumerado para realizarlas con una réflex: sujetar el móvil con las dos manos, la postura de la espalda, los codos, las piernas etc. Aún así podemos destacar algún que otro truco para estar seguros de que nuestras fotos de móvil salgan lo más nítidas posible.
En este caso no deberás mirar por el visor, sino que tendrás que sujetar el móvil a una cierta distancia para ver bien el encuadre en la pantalla, pero intentando mantener los codos pegados a tu cuerpo, para ganar estabilidad.
Otra cosa que debes tener en cuenta, aunque parezca una obviedad, es que debes comprobar que la lente de la cámara está en perfecto estado. Al no tener ningún tipo de protección, estas lentes pueden sufrir golpes o ralladuras, humedad por los cambios de temperatura o, simplemente, pueden estar sucias por que las hayamos tocado con la mano. Límpiala suavemente con un tejido no dañino o con una gamuza y cuídala para que esté siempre perfecta.
Por otro lado, ten en cuenta dos consejos más para cuidar la nitidez de tus fotografías con Smarphone: evita utilizar el zoom y usa el enfoque manual.
Debes intentar hacer tus fotografías sin utilizar el zoom de tu cámara ya que siempre perderá calidad y es más posible que aparezca ruido o que la foto salga borrosa. Es mejor que te acerques más para realizar la fotografía que deseas y prescindas de él.
Utilizar el autofocus de tu móvil para enfocar también es un riesgo. Yo te aconsejo que enfoques de forma manual el punto que quieres que salga más nítido tocándolo en la pantalla, para asegurarte de que el elemento que te interesa aparece más enfocado que el resto de la imagen.
¿Cuál es tu Truco para Ganar Estabilidad? ¡Cuéntanoslo!
¿Te das cuenta de lo importante que es saber cómo sujetar de forma estable tu cámara? Sin duda, estas son solo algunas posturas que yo te recomiendo para que practiques en tus próximas sesiones.
Hay infinidad de posiciones y formas de sujetar una cámara y cada fotógrafo tiene la suya propia. Lo importante es que tu encuentras aquella con la que te sientas más estable, más firme y más cómodo.
¿Tienes algún truco o postura personalizada para realizar fotos con mayor estabilidad? ¡Cuéntanoslo!