Ya te hemos hablado en muchas ocasiones sobre filtros en fotografía, y es que existe una gran variedad de filtros de muchos tipos, tamaños, materiales y formas que nos van a permitir desde proteger nuestro equipo hasta conseguir fotografías que sin ellos no serían posibles.
Por eso hoy te traemos esta guía donde recogemos todos los tipos de filtros que existen y te hablaremos sobre sus funciones para que puedas decidir qué filtro te interesa más adquirir.
Formas y Materiales
Antes de hablarte sobre los diferentes tipos de filtros que hay, vamos a ver primero en qué formas y materiales los tenemos disponibles para elegir, ya que esto va a ser algo que compartan muchos de ellos.
¿Redondos o Cuadrados?
Puede que la mayoría de filtros que hayas visto sean redondos y enroscados al objetivo de tu cámara, pero no todos son así. Muchos también vienen en formato cuadrado o rectangular pero, ¿cuál es mejor? En primer lugar cabe decir que ninguno es mejor que el otro; son sistemas diferentes y cada uno tiene sus ventajas e inconvenientes.
Los filtros redondos tienen como ventaja principal que no requieren de un portafiltros, ya que se enroscan directamente al objetivo. Sin embargo, como desventaja nos encontramos con que deberán encajar con el diámetro del objetivo para poder enroscarse en él. Si quieres usar el mismo filtro redondo en varios objetivos, un truco es comprar el filtro de mayor diámetro y acoplarlo en los objetivos de menor diámetro usando anillos adaptadores.
Por su parte, lo bueno de los filtros cuadrados y rectangulares es que pueden apilarse unos con otros para aprovechar sus funciones a la vez. No obstante, como parte negativa nos encontramos con que suelen ser más grandes que un filtro redondo y, por tanto, también más caros. Además, requieren de un portafiltros para poder sujetarse al objetivo, por lo que eso incrementará su precio final todavía más.
Deberás tener en cuenta que el portafiltros se va a enroscar a tu objetivo y que, aunque normalmente vienen con anillos adaptadores incluidos, si lo usas con un objetivo gran angular cabe la posibilidad de que el propio portafiltros interfiera en el ángulo de visión de tu objetivo. Así que aunque acople, deberá ser lo suficientemente ancho como para no viñetear tus fotografías más angulares.
¿Cristal o Resina?
Si te has puesto a mirar filtros, seguro que te habrás dado cuenta de que hay una enorme diferencia de precios; puedes encontrar filtros por menos de 5€ y filtros por más de 100€. ¿Por qué?
Dejando aparte la obviedad de que los filtros más grandes son más caros, lo cierto es que también hay mucha diferencia de precio entre filtros del mismo tamaño, y no solo tiene que ver con la marca. Algo que va a marcar mucho la diferencia de precios va a ser el material con el que están construidos. Los dos materiales más comunes son la resina y el cristal óptico.
Los filtros de resina tienen como ventajas que son mucho más ligeros, baratos y no corren peligro de romperse si se caen. Sin embargo se rayan con muchísima facilidad y, lo peor, restarán calidad a nuestras fotografías, sobre todo a las de larga exposición. Este tipo de filtros suelen mermar mucho la nitidez de las tomas, pueden producir reflejos y aberraciones, y tienden a virar la fotografía hacia alguna dominante de color, como por ejemplo magenta o azul. Si apilas más de uno, estos efectos negativos se multiplicarán exponencialmente.
Por su parte, los filtros de cristal son más caros, pesados y frágiles, pero a cambio vamos a obtener una calidad mucho mayor en nuestras fotografías. Los filtros de cristal no suelen tener dominantes de color y no mermarán la nitidez de nuestras tomas incluso aunque apilemos varios y hagamos fotografías de larga exposición.
Dentro de estos dos materiales, como en todo, siempre vamos a encontrarnos filtros con una mayor o menor calidad, y con un mayor o menor precio. Si no quieres jugártela, opta siempre por filtros de marcas reconocidas como por ejemplo B+W, Hoya, Tiffen, Hama, Lee, NiSi o Hitech. También será interesante que consultes las opiniones de los usuarios que ya lo han comprado, e incluso que mires alguna review del filtro en internet, si la hay.
Filtros UV
Los filtros ultravioleta, también conocidos como filtros UV (o simplemente filtros protectores) son filtros totalmente transparentes y no cambian para nada nuestras fotografías. Están pensados únicamente para proteger físicamente la lente de golpes, polvo, arañazos, etc.
Este tipo de filtros tienen sus partidarios y sus detractores. Si bien es cierto que protegen el objetivo de algunos posibles daños, los más puristas afirman que se pierde nitidez y calidad de imagen con su uso, ya que pueden producir flares y difracción, y sus materiales tienen peor calidad que las lentes que componen un objetivo bueno.
Por ello, es una elección personal del usuario el disfrutar plenamente de las posibilidades del objetivo bajo el riesgo de sufrir algún percance en la óptica de la cámara, o utilizar uno de estos filtros para proteger la lente a cambio de perder algo de luz, calidad y/o nitidez.
Filtros Polarizadores
Los filtros polarizadores se caracterizan por dejar pasar únicamente la luz polarizada a medida que giramos su anillo. Esto nos proporciona algunas funciones interesantes como:
- Eliminar reflejos sobre superficies no metálicas como agua, cristal o la pintura de un vehículo, especialmente con ángulos entre 30º y 40º.
- Realzar los colores de la vegetación al filtrar los reflejos azulados del cielo.
- Eliminar luz en el cielo oscureciendo y saturando así su tono azul, con lo que las nubes blancas se realzan frente a este azul tan intenso del cielo. Este efecto varía en intensidad en función del ángulo respecto al sol.
Si quieres saber más sobre los filtros polarizadores y cómo usarlos, no te pierdas nuestro artículo "Filtro Polarizador: Qué Es y Para Qué Sirve".
Filtros de Densidad Neutra (ND)
Los filtros de densidad neutra, también conocidos como filtros ND (Neutral Density), filtran todo el espectro visible de la luz con el objeto de reducir la intensidad lumínica que penetra en el objetivo, sin que se modifique el color o el contraste de la fotografía.
Estos filtros nos ayudan a reducir la cantidad de luz en nuestras fotografías, cuando no podemos reducirla usando los parámetros del triángulo de la exposición porque queremos usarlos de algún modo específico, por ejemplo:
- Cuando queremos abrir mucho el diafragma para jugar con la profundidad de campo.
- Cuando queremos disparar fotografías de larga exposición a plena luz del día, para crear por ejemplo efectos muy atractivos como el efecto seda o las trazas de nubes.
Estos filtros tienen diferentes grados de opacidad que restarán más o menos luz (por ejemplo ND4, ND8, ND16, ND1000, etc.) y también tienen diferentes variantes, como los filtros ND graduados (GND) o los filtros ND variables. Si quieres saber todo sobre ellos, te recomiendo que consultes los siguientes artículos:
- Filtros ND: El Secreto para Dar el Salto en Tus Fotos en Exterior
- Filtros Graduados de Densidad Neutra (GND): Qué Son y Para Qué Sirven
- Filtro ND Variable: Qué Es y Guía de Compra
Otros Filtros
Aunque los filtros que hemos visto son los más habituales, existen muchos otros filtros que podemos encontrar para conseguir fotografías diferentes. Algunos de los más conocidos son:
- Filtros infrarrojos: Los filtros infrarrojos se encargan de filtrar el espectro visible, dejando pasar tan solo las radiaciones infrarrojas, creando fotografías con unos colores muy curiosos y fantásticos. El número acompaña a estos filtros hace referencia a la longitud de onda, dentro del espectro visible, hasta la que es capaz de filtrar. Aunque los más comunes son los 720 nm, podemos encontrar otros como los 850 nm, 950 nm, etc.
- Filtros de color: Estos filtros absorben ciertos colores y sólo dejan pasar otros. Con esto se consiguen efectos muy curiosos, especialmente en fotografía en blanco y negro, puesto que aquellos objetos en los que predomina el color del filtro o su complementario aparecen claramente resaltados en la fotografía. También pueden servirnos para darle a nuestras fotografías un toque de color diferente y original.
- Filtros de contaminación lumínica: Estos filtros son ideales para fotografiar la ciudad de noche, ya que son capaces de filtrar esa contaminación tan amarillenta que emiten las luces de la ciudad para evitar ese resplandor o glow que suelen crear, así como también modificar el balance de la fotografía para generar unos tonos más atractivos (menos amarillentos). Sin embargo, ten en cuenta que este tipo de filtros no eliminarán la contaminación lumínica en el cielo para realizar astrofotografía.
- Filtros para astrofotografía: Existen diversos filtros especiales para astrofotografía que realzarán regiones concretas del espectro electromagnético para captar más información de ciertos cuerpos celestes o nebulosas.
- Filtros solares: Fotografiar directamente hacia el sol, sobre todo si intentamos fotografiarlo con un teleobjetivo, puede ser muy peligroso tanto para nuestros ojos como para el sensor de nuestra cámara. Para poder fotografiar el sol sin peligro siempre será recomendable usar un filtro solar.
- Filtros de estrella: Con los filtros de estrella conseguiremos que todos los puntos brillantes de nuestra fotografía aparezcan con un destello en forma de estrella. Dependiendo de las líneas que tenga grabadas el filtro generará estrellas con más o menos puntas.