Si existe un evento en el que siempre usamos nuestra cámara digital, ese es la celebración de una fiesta de cumpleaños. Es de esos momentos en los que hacemos más o menos fotos, tratando de recoger esos instantes que volveremos a visionar una y otra vez.
En este artículo te contamos una serie de sencillas técnicas para conseguir hacer mejores fotos en los cumpleaños. ¿Te los vas a perder?
Y es que, ¿quién ha dejado alguna vez pasar la oportunidad de sacar la cámara en el cumpleaños de algún familiar o amigo? Es de esas ocasiones tan especiales que intentamos no pasar por alto, haciendo nuestras mejores instantaneas.
Pero si revisas los resultados de otros cumpleaños, es probable que veas siempre las mismas fotos, y casi siempre los mismos fallos. Y tan solo dedicando unos minutos a reflexionar sobre estos consejos lograrás mejorar tu técnica y, con ella, tus resultados.
Si se trata de un fiesta de cumpleaños de algún niño, no dejes de revisar también el artículo "La Guía Definitiva para Fotografiar Niños Pequeños". Seguro que te resulta de gran utilidad.
1. Nombra un fotógrafo oficial para la fiesta
Lo primero de todo, si no vas a encargarte tú mismo de hacer las fotos, nombra un "fotógrafo oficial". Alguien debe responsabilizarse de hacer las fotos. De lo contrario, podrías encontrarte con que la emoción del momento haga que nadie se acuerde de hacer fotos en los momentos más críticos de la fiesta.
Asignando a alguien la responsabilidad de hacer las fotos evitarás el riesgo de quedarte sin inmortalizar este evento tan especial.
2. Revisa tu equipo antes de salir
Si no vas a estar en casa, o incluso si lo estás, no olvides preparar con tiempo suficiente tu material fotográfico.
Revisa el estado de las baterías, comprueba que llevas todo el equipo que vayas a necesitar, y limpia bien el objetivo de la cámara.
Es muy desagradable llegar a la fiesta y darse cuenta de que te has olvidado algo justo cuando más necesitas tu cámara.
En el artículo Material Fotográfico Básico para Viajes repasamos todo el material típico que podemos necesitar para un viaje. Es probable que te dé alguna pista sobre las comprobaciones que necesites realizar.
3. Usa la perspectiva de los niños
Los niños tienen una altura muy diferente de los adultos. Para fotografiarlos es preferible que, en lugar de hacer las fotos desde tu posición natural, apuntando con tu cámara hacia abajo, te agaches para poder hacer las fotos a los niños más pequeños desde su propia altura.
Con esto conseguirás hacer unas fotos mucho más naturales, recogiendo la fiesta desde su propio punto de vista. Verás como este nuevo enfoque da a tus imágenes un toque de interés adicional.
4. Juega con diferentes posiciones y distancias focales
La primera de las posiciones es la que acabo de comentarte; agachado a la misma altura que se encuentre el niño.
Pero no te limites a hacer las fotos desde esa posición. Prueba desde otros ángulos y posiciones; súbete a una silla para hacer las fotos desde un alto, tírate al suelo, prueba con diferentes ángulos... Lo importante es tirar fotos desde perspectivas diferentes cada vez.
Prueba también con varias distancias focales. Las focales cortas te permitirán sacar perspectivas generales del sitio en el que te encuentres, dando mucha información sobre el sitio, mientras que las focales más largas te permitirán captar y aislar los detalles con más facilidad.
5. Ajusta el balance de blancos
Si estás disparando en JPEG y se trata de fotos en el interior de una estancia, ya sea con flash o con luz artificial, no te olvides de ajustar el balance de blancos antes de empezar la fiesta. Puedes utilizar uno de los modos de balance de blancos preconfigurados que trae tu cámara, o puedes ajustarlos manualmente mediante alguno de los métodos que te hemos explicado alguna vez.
Si tu cámara de fotos permite disparar en formato RAW y estás utilizándolo, no tienes por qué preocuparte de configurarlo. Y es que el ajuste del balance de blancos posterior es una de las múltiples ventajas del formato RAW frente al JPEG.
6. Busca el detalle
No todas las fotos que hagas pueden ser vistas generales de la fiesta. Suele ser una buena idea buscar esos pequeños detalles que mejor representan una fiesta de cumpleaños: los adornos, las velas de la tarta, algún regalo, ...
No dejes de hacer fotos de esos pequeños detalles. También te ayudarán a recordar con cariño ese día tan especial.
7. Utiliza el flash de rebote
Si estás disparando en interior y piensas usar flash, si es posible, utilzia el flash de rebote.
Conseguirás una iluminación más equilibrada de toda la estancia a la vez que evitarás que los objetos en primer plano salgan quemados por la luz.
En este artículo te damos 5 Excelentes Razones para Comprar un Flash Externo y en este otro artículo explicamos 4 Formas Diferentes de Rebotar la Luz del Flash.
8. Recoge la naturalidad del momento
Una de las claves para hacer buenas fotografías es tratar de pasar desapercibido cuando estés trabajando con tu cámara.
Se natural y no fuerces a la gente a que pose para tí. A muchas personas les resulta incómodo y acaban forzando gestos poco naturales.
Es mucho mejor que hagas fotos cuando la gente no se de cuenta de que les estás fotografiando. Sus gestos serán mucho más naturales de este modo, con lo que tus fotos ganarán en el resultado final.
9. Planea las fotos
Hay una serie de fotos muy especiales en los cumpleaños. El momento de apagar las velas o cuando se reciben y abren los regalos son dos instantes que representan la magia del cumpleaños.
Para este tipo de fotos, siempre que sea posible, puedes hacer algunas pruebas previas para ver cual es la mejor distancia, iluminación o configuración de tu cámara.
El instante de apagar las velas de la tarta pasa muy rápido, y solo eligiendo una buena ubicación, iluminación y parámetros de la cámara conseguirás el resultado deseado.
10. Haz fotos antes y después
Puedes aprovechar un rato antes del cumpleaños y despúes de que acabe para hacer ciertas fotos. Los detalles de la tarta o la decoración, la zona donde se va a hacer la fiesta, ...
Si haces esas fotos cuando esté todo preparado antes de que lleguen los invitados, dispondrás de más tiempo y tranquilidad para poder hacer, comprobar y repetir si es necesario esas fotos.
Nadie sabrá después si la foto en la que sacabas el detalle de las velas la hiciste justo antes de soplar la tarta o la habías hecho un rato antes.
Hay otros momentos que puedes recoger también, como la llegada de los invitados. Si aprovechas ese momento, tendrás fotos de todo el mundo sin necesidad de agobiarles en exceso.
11. Utiliza el modo de disparo de ráfaga
Hay momentos que duran demasiado poco como para jugartelos a una sola foto.
Utilizando el modo de disparo de ráfaga, siempre que tu cámara lo permita (revisa el manual; prácticamente todas las cámaras cuentan con este modo de disparo) puedes asegurar una buena toma disparando varias fotos seguidas.
Con ello evitarás pestañeos desagradables en los que los invitados puedan salir con los ojos cerrados.
12. Incluye a los adultos en tus fotos
Aunque este tipo de fiestas está muy centrada en lo niños, no dejes pasar el momento de hacer también fotos a los adultos solos o acompañados de los niños. Podrás disponer de recuerdos interesantes en familia o con los amigos en esos momentos tan especiales.