Cualquier momento del año puede ser un buen momento. ¿Tal vez estás pensando en comprar una réflex digital? Aunque el precio de las DSLR ha bajado mucho en los últimos tiempos, sigue siendo un capricho que cuesta unos cuantos euros.
Si eres un fotógrafo experimentado, has vivido las limitaciones de tu cámara actual, o simplemente te han convencido las 7 Razones por las que SI Deberías Comprarte una Réflex Digital, sencillamente deja de leer aquí: seguramente tu elección esté convenientemente fundamentada. Si ese no es tu caso... ¿estás seguro de que lo que necesitas es una réflex digital?
¿Réflex o No Réflex? Esa Es La Cuestión
Hoy en día podemos adquirir una cámara réflex por precios realmente asequibles, pero el mercado se ha llenado de opciones que pueden seducirnos incluso más que una réflex digital según la utilidad que le vayamos a dar. Desde las cámaras compactas avanzadas que ya nos dejan ajustar nuestra toma con parámetros en manual, hasta las nuevas y potentes cámaras evil y sin espejo, también conocidas como cámaras CSC. De éstas últimas ya te hablábamos en este otro artículo recomendándote unas cuantas.
Más que guiarse por las especificaciones técnicas de unas u otras, o de sus precios, lo que debemos valorar y pensar es el uso que le vamos a dar a la cámara que estás apunto de adquirir. ¿De verdad te va a compensar comprarte la réflex más cara del mercado, porque en teoría es mejor, si lo que vas a hacer es sobre todo fotografía de viaje, y contamos con que llevarás una mochila cargada con material más importante que el fotográfico (comida, agua y abrigo)? ¿No será mejor llevar una cámara buena, pero que ocupe mucho menos para que puedas disfrutar de tu viaje en plenitud sin que te falte de nada?
Éste es solo un ejemplo para que reflexiones si tu predilección por una réflex está justificado o no. Por supuesto, este no pretende ser un artículo para disuadirte de que no adquieras este tipo de cámara, sino más bien vamos a ofrecerte una serie de cuestiones que deberías plantearte antes de adquirir tu nueva cámara para que se ajuste perfectamente a tus necesidades. ¡Veamos cuáles son!
1. La Mejor Cámara Es la que Llevas Encima
No hay duda de que las réflex suelen ser cámaras que cuentan con mayores prestaciones (sensores más grandes, más megapíxeles, cuerpos más robustos, mayor versatilidad gracias al posible intercambio de objetivos...). Pero también son superiores en tamaño y peso.
La ergonomía es un elemento esencial para los fotógrafos profesionales, pero no suele ser así para muchos de los aficionados que empiezan. Piensa que no tiene sentido comprarse una réflex si después te va a dar pereza sacar la cámara de la mochila por su peso y tamaño. Ante esta situación, sencillamente es más aconsejable que elijas una cámara que no te cueste trabajo llevar encima.
2. Si Vas a Usar el Modo Automático...
Son muchos lo que buscan captar el momento con una fotografía, pero que sencillamente solo quieren conseguir eso, captar el momento. No buscan complicarse teniendo que eligir los parámetros adecuados, indicarle a la cámara qué velocidad utilizar, qué ISO o qué diafragma... Quieren que su cámara esté preparada ante cualquier situación, que sea sacarla de la mochila y disparar.
Este artículo no trata de decirte cómo debes usar tu cámara. Si eres de los que quieren captar el momento sin preocuparse de los números, entonces te recomendamos que no te compres una réflex digital. Si la vas a usar exclusivamente en modo automático, una cámara compacta o una evil pueden hacerte mucho mejor papel.
Las cámaras réflex incorporan multitud de controles y ofrecen muchísimas posibilidades, pero hay que tomarse el tiempo necesario para aprender a usarlas y explotarlas. Si no requieres capacidad de control manual, muy probablemente no aprecies grandes diferencias entre las fotos que podrías hacer con una buena compacta, una evil y una DSLR.
3. La Cámara No Hace la Foto: Es el Fotógrafo el que la Hace
Muy frecuentemente la gente quiere echar un vistazo a ejemplos de fotografías que la cámara tal o cual hacen, pensando que es el tipo de fotos que podrían hacer ellos mismos con el mismo modelo. Tal vez esta creencia sea un éxito del marketing, pero dista mucho de ser real.
Los grandes artistas son capaces de hacer obras de arte con material mediocre. Por eso, no te compres una réflex digital pensando que la calidad de la cámara te va a garantizar fotos espectaculares. Ya lo decía Ansel Adams...
El componente más importante de una cámara son los 30 cm tras ella.
Y también Arnold Newman.
Muchos fotógrafos piensan que si compran una cámara mejor serán capaces de hacer mejores fotos. Una cámara mejor no hará nada por ti si no hay nada en tu cabeza o en tu corazón.
No olvides que eres tú quien realiza las fotografías, no la cámara. Tú decides lo qué captar. Tú decides qué visión plasmar de una escena. Evidentemente la cámara te ayudará a que salgan mejor o peor, pero si no hay nada de interés en tu forma de fotografiar el mundo, da igual que lo hagas con la cámara más cara que con el móvil. Y al igual ocurre en el caso contrario, si eres bueno puedes captar una fotografía preciosa con la cámara de un móvil.
4. No Pagues por Funcionalidades que No Vas a Usar
Las cámaras réflex valen un dinero. Aunque sus precios ahora son muy competitivos, no dejan de ser cantidades que debemos valorar antes de lanzarnos a adquirirlas. Además, están condicionadas por la adquisición de un buen objetivo, que vale incluso más dinero que la propia cámara, y un sin fin de accesorios con la que la podrás complementar.
Si tu perfil es de tipo apunto-y-disparo y andas justo de presupuesto, no pagues más por muchas de las funcionalidades que incorporan las DSLR y que no vas a usar. ¿Para qué quieres que tu cámara sea capaz de fotografiar a 25.000 ISO si vas a realizar fotos siempre de día?
5. Exigen Mayor Cuidado
Uno de los problemas típicos con que se encuentran los usuarios de las réflex digitales es el polvo y la suciedad que se acumulan en su sensor, y que hacen aparecer elementos no deseados en las fotos. Afortunadamente, son muchos ya los modelos que incorporan sistemas de limpieza de sensor por ultrasonidos. Pero una DSLR requiere ser más delicado y cuidadoso. Si además pretendes usarla en condiciones extremas y la cámara se daña, es mejor si ésta no te costó una buena suma de dinero ¿no crees?
Piensa que si después de todo no vas a sacar la foto que querías porque te da miedo que le pase algo a tu (cara) cámara, al final es como si no llevaras nada.
6. La Mejor Cámara Es la que se Ajusta a Tus Necesidades y a Tu Bolsillo
En definitiva, la correcta elección de una cámara digital parte del conocimiento de tus necesidades: lo que quieres, lo que esperas y lo que más valoras. Paga sólo por las funcionalidades que vas a usar. Si por el mismo precio tienes más, por supuesto cógelo, pero si no es el caso y la diferencia es notable... apuesta por escoger el modelo de aquella cámara que se ajuste a lo que tu vayas a utilizar o preveas utilizar.
Piensa mucho en el presupuesto del que dispones: el hecho de que tengas dinero no quiere decir que tengas que gastarlo todo. Tal vez la cámara que necesitas cuesta menos de lo que pensabas...
7. Y Por Último...
Y a modo de compendio para acabar decidiendo si es una réflex lo que estás buscando, puedes preguntarte... ¿Qué es lo que necesito que haga mi próxima cámara digital que no pueda hacer una compacta avanzada o una cámara csc? ¡Piénsalo!
¿Y tú? ¿Eres de los que apuestan por una réflex o tienes otro tipo de cámara? ¡Cuéntanoslo!